La Paz, 14 dic (EFE).- El presidente de Bolivia, Luis Arce, dijo este jueves que «hay que parar las orejas» ante los posibles efectos que tengan las medidas del Gobierno de Javier Milei en los países vecinos de Argentina y aseguró que su administración tomará todas las medidas necesarias para «defender» la economía nacional.
Arce mencionó a los medios en La Paz que hay estar atentos ante las medidas que se están tomando en Argentina, sin especificar cuáles.
«No es lo que uno hubiera esperado que se haga porque el discurso de la campaña era uno y ahora se están tomando otras medidas adicionales a las que se había mencionado, que no solamente pueden afectar al país, pueden afectar a todos los vecinos de Argentina», alertó el mandatario.
«Puede estar afectando a Chile, a Paraguay, a Uruguay y por supuesto nosotros no vamos a estar exentos, somos países vecinos. Y hay que estar atentos a lo que pueda estar ocurriendo para tomar cualquier medida que sea necesaria para defendernos, para defender nuestra economía», añadió.
Arce sostuvo que su Gobierno «va a tomar todas las medidas que sea necesario para defender y cuidar» lo que ha hecho en materia económica para conservar la «estabilidad de precios», para «cuidar que la economía siga creciendo» y se preserven los empleos.
En los últimos años, Bolivia tuvo una buena relación con Argentina, salvo algunos desencuentros durante los Gobiernos de Evo Morales y Mauricio Macri, y de la presidenta interina Jeanine Áñez con el mandatario argentino saliente, Alberto Fernández.
Morales (2006-2019) fue aliado del fallecido Néstor Kirchner y de Cristina Fernández de Kirchner, mientras que Arce reeditó esa alianza con Fernández desde que llegó al poder a fines de 2020.
Analistas políticos y económicos han advertido sobre un panorama incierto y complicado en la relación bilateral entre Bolivia y Argentina por las diferencias ideológicas entre Arce, un economista de izquierda, y el ultraderechista Milei, también economista.
Arce no asistió a la investidura del nuevo presidente argentino y decidió enviar a su canciller, Celinda Sosa, como representante del país.
El Gobierno boliviano ha manifestado que espera mantener «el mismo nivel de cooperación fructífera» que ha tenido hasta el momento con Argentina y que se pueda «trabajar» para «promover los intereses» de ambos países.
La amplia agenda bilateral entre Bolivia y Argentina incluye temas energéticos, fronterizos, comerciales y de migración, entre otros.
