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24 de abril de 2024

Caen acciones de Estados Unidos y FED espera subir tasas recién en 2023

Los títulos en Wall Street registraron una nueva jornada a la baja, ante la preocupación por el crecimiento económico en ese país. Desde la FED afirman que las tasas de interés serían corregidas recién en el 2023 y que incluso puede darse una nueva reducción a fines de este año, en medio del temor que genera la propagación de la variante Delta.

En la jornada de hoy, el portal de noticias de Bloomberg informó que el mercado de valores en Estados Unidos tuvo un impacto negativo ante la sugerencia de la Reserva Federal (FED) sobre el futuro de las tasas de interés, que recién se modificarían en el 2023. Esto, como consecuencia de los temores que existen sobre la falta de un crecimiento pleno de la economía de ese país. 

Según el portal, los datos económicos al cierre de julio mostraron que las empresas norteamericanas tuvieron un repunte mucho menor de lo que se esperaba en cuanto a la contratación de nuevos empleados. En este contexto, el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años aumentó a 1,17%.

El anuncio de la FED estuvo a cargo de su vicepresidente, el economista Richard Clarida, quien apuntó que la institución tiene planes de modificar al alza el trayecto de su política monetaria en el 2023, y que incluso se podría registrar una nueva reducción de la tasa hacia finales de este año en un contexto de preocupación por la variante Delta del COVID-19.

Esta declaración del funcionario fue realizada luego de que se conocieran indicios de que el Tesoro de Estados Unidos podría recortar las ventas de bonos este otoño, recortando así los estímulos a la economía del país que se encuentra todavía en un proceso de recuperación

De esta manera, el índice bursátil S&P 500 cayó, debido a que General Motors Co. y CVS Health Corp. tuvieran reducciones en sus ganancias, mientras que el Nasdaq 100 tuvo un repunte gracias a algunas empresas de tecnología que tuvieron un mejor rendimiento.

Hacia mediados de junio, la Reserva Federal anunció que adelantaría para finales del 2023 su modificación de tasas, en vez de hacerlo en el 2024. Este era el plan anterior del órgano monetario, en un contexto que se caracterizaba por el crecimiento económico y el fuerte consumo, previo a la expansión masiva de la variante Delta.