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9 de diciembre de 2024

Decisiones contradictorias mantienen en vilo la subasta de saneamiento de Río

Río de Janeiro, 29 abr (EFE).- La Asamblea Legislativa de Río de Janeiro (Alerj) suspendió este jueves la subasta de la compañía de acueducto y alcantarillado de ese estado, que era considerada la mayor privatización de saneamiento básico de Brasil, un día antes de la celebración del concurso.

Por 34 votos a favor y 22 en contra, los diputados fluminenses aprobaron un decreto que prohíbe la venta de la Compañía Regional de Aguas y Alcantarillados (Cedae, por sus siglas en portugués), cuya subasta estaba prevista para el viernes y contaba con al menos cuatro grupos interesados.

La compañía estatal es la responsable de distribuir agua y llevar saneamiento básico para 64 de los 92 municipios del estado de Río de Janeiro y su privatización supondría la mayor concesión del sector jamás ofertada en el país.

Según el proyecto aprobado por la Alerj este jueves, la celebración de la pugna quedó condicionada a la prórroga de un acuerdo celebrado entre el estado de Río de Janeiro y el Gobierno central para la suspensión temporal del pago de deudas federales.

La venta de la Cedae tenía previsto otorgar al sector privado la concesión por 35 años de los servicios de acueducto y alcantarillado que llegan a unas 16 millones de personas en el estado fluminense.

Asimismo, según explicó el secretario de la Casa Civil (jefe de Gabinete) del Gobierno de Río, Nicola Miccio, estaba previsto que dejara a la región inversiones por 30.000 millones de reales (unos 5.560 millones de dólares) y generara unos 26.000 empleos directos e indirectos.

Según el edicto publicado por el Gobierno regional, para la subasta los servicios que actualmente presta la Cedae iban a ser divididos en cuatro bloques que atenderían 35 ciudades del estado de Río, distribuidos de manera que todos incluyan urbes con mayor rentabilidad y municipios no tan rentables,

El valor mínimo de las ofertas era de 10.600 millones de reales (unos 1.978 millones de dólares), además de la obligación de invertir al menos 1.860 millones de reales (347 millones de dólares) en zonas más desfavorecidas de Río.

Asimismo, la privatización de la Cedae incluía acciones para descontaminar la icónica bahía de Guanabara en la ciudad de Río de Janeiro, así como la cuencas del río Guandú y el complejo de lagunas de Barra Tijuca.

Para lograr este objetivo se invertirían 5.750 millones de reales (unos 1.072 millones de dólares) en los próximos cinco años, según el Gobierno regional.

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