São Paulo, 1 nov (EFE).- La Justicia brasileña negó preliminarmente y condicionó este miércoles el pedido de recuperación judicial presentado por SouthRock, la empresa que opera marcas como Starbucks y Subway.
En su decisión, el juez Leonardo Fernandes dos Santos, del 1° Tribunal de Quiebras de São Paulo, solicitó un informe pericial sobre la documentación presentada por la empresa para dar proseguimiento con la acción.
«Ordeno que se compruebe la situación real de funcionamiento de la empresa, así como el peritaje previo de la documentación presentada por el solicitante» para «constatar su correspondencia con sus libros fiscales y mercantiles», dictó el juez.
Fernandes determinó un plazo de siete días para que la empresa de administración judicial Laspo Consultores presente el laudo y justificó su decisión en la «necesidad de conocimiento técnico» para analizar la situación sobre la documentación presentada.
SouthRock presentó la petición debido a su crítica situación financiera, con deudas que superan los 1.805 millones de reales (unos 360 millones de dólares o 342 millones de euros).
La recuperación judicial es un proceso amparado en la ley de quiebras brasileña, que permite que las empresas continúen funcionando y renegocien sus deudas con el objetivo de evitar la bancarrota.
En un comunicado enviado a varios medios de comunicación este miércoles, la empresa señaló «los desafíos económicos en Brasil resultantes de la pandemia, la inflación y los elevados tipos de interés» como principales causas de sus pérdidas.
Afirmó que, además del proceso de recuperación, emprenderá una serie de acciones para «ajustar su modelo de negocio a la actual realidad económica» del país.
En ese mismo comunicado, SouthRock indicó que entre las medidas que van a llevar a cabo para atajar su deuda se encuentra una revisión del «número de tiendas operantes» así como «su fuerza de trabajo».
La empresa SouthRock fue fundada por el inversor estadounidense Kenneth Pope en 2015 y consiguió la licencia para operar los 113 establecimentos de Starbucks en el país en 2018.
Cuatro años después, en 2022, se hizo con el control de la franquicia de Subway en Brasil, que cuenta con más de 1.600 restaurantes.