México, 13 ago (EFE).- El Banco de México bajó este jueves la tasa de interés en 50 puntos base y la fijó en el 4,5 %, en lo que supuso el quinto recorte del precio del dinero en cinco meses para proveer de liquidez al mercado ante la pandemia de COVID-19.
La Junta de Gobierno de Banco de México tomó esta decisión tras considerar los riesgos para la inflación, la actividad económica y los mercados financieros.
Esta resolución es la quinta rebaja de la tasa de interés en los cinco últimos meses en el país, ya que hasta el 20 de marzo, cuando la pandemia de coronavirus empezó a tener graves efectos económicos para México, estaba en el 7 %.
La junta, formada por cinco miembros, tomó la medida por mayoría y no por unanimidad como en la última decisión de política monetaria del 25 de junio, puesto que uno votó por disminuir la tasa al 4,75 %.
El instituto emisor destacó que «la economía global, tras las fuertes caídas registradas en marzo y abril, comenzó a mostrar una cierta mejoría en mayo y junio» y que «las autoridades monetarias han mantenido las tasas de interés en niveles históricamente bajos».
«Organismos multilaterales y analistas anticipan una fuerte contracción en este año y un crecimiento moderado en el próximo, aunque dichas previsiones están sujetas a un alto grado de incertidumbre», detalló el banco central mexicano en un comunicado.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) pronostica una caída de la economía mexicana del 10,5 % en 2020.
La pandemia ha dejado hasta el momento 498.380 contagiados y 54.666 muertos en México, que es el tercer país con más decesos, pro detrás de Estados Unidos y Brasil.
El 29 de julio, la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos mantuvo sin cambios los tipos de interés el rango de entre 0 y 0,25 %.
El Banco de México enfatizó que desde la última decisión de política monetaria en junio, «los mercados financieros globales continuaron mostrando un comportamiento positivo» gracias a «las medidas de estímulo» y la «gradual reapertura de la actividad productiva».
Sin embargo, advirtió que «no se han alcanzado las condiciones previas a la pandemia» y que «las condiciones financieras globales y nacionales seguirán sujetas principalmente a los efectos» de la crisis sanitaria global.
Si bien la inflación general aumentó del 3,33 % al 3,52 % entre junio y julio, el Banco de México mantiene su pronóstico para que a largo plazo se ubique alrededor del 3 %.
El próximo anuncio de política monetaria por parte del Banco de México se espera para el 24 de septiembre.