Quito, 3 ago (EFE).- El acceso a créditos para las mujeres emprendedoras y el sector agrario, así como la promoción de la inclusión financiera y de la igualdad, es lo que ha llevado a un banco ecuatoriano a ser reconocido internacionalmente por primera vez con el premio a la mejor responsabilidad corporativa de Latinoamérica.
Recientemente, el Banco Pichincha, que tiene 117 años de vida y operaciones en Colombia, Estados Unidos, España y Perú, además de en Ecuador, fue distinguido dentro de los Premios a la Excelencia 2023 que otorga la revista británica Euromoney, como la referencia de la región en temas de responsabilidad social.
Una parte de los microcréditos entregados a mujeres proceden del primer bono de género de la historia de Ecuador, emitido en 2022 por la entidad con sede en Quito por un valor de 100 millones dólares, que suscribieron a partes iguales el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Corporación Financiera Internacional (CFI).
Desde abril de 2021, el 60 % de los microcréditos fueron destinados a negocios liderados por mujeres, un porcentaje que llega al 50 % en el sector agrícola.
DE VENDEDORA AMBULANTE A MICROEMPRESARIA
Entre esas emprendedoras está Sonia Landeta, que invirtió el dinero en fundar Aromcars, una microempresa con la que pasó de vender ambientadores de automóvil y de hogar en las calles a tener su propio local en Quito, registro sanitario e incluso permiso para exportar.
En su caso, relató a EFE que en otras entidades se encontró con trabas para acceder al crédito que necesitaba, hasta que llegó a este banco hace cuatro años.
«Cuando te cierran las puertas en un lado, y vas a otro lugar y te las abren sin contratiempos, sientes el apoyo que te faltaba para ser un emprendedor, y no uno mediocre, y para que tu proyecto sobresalga», resaltó.
Ahora espera seguir haciendo crecer su negocio bajo la premisa de «calidad, no cantidad», y ser «fuente de muchos empleos» y compartir su experiencia con mujeres del campo.
«Las mujeres de Ecuador son luchadoras y estos microcréditos les van a ayudar mucho a las que estén decididas a salir adelante, porque empoderarse es aferrarse a tus metas para salir adelante», señaló.
ATENCIÓN A SECTORES DESATENDIDOS
En total han sido 1.300 millones de dólares entregados en créditos a unas 300.000 mujeres en los últimos años, según destacó a EFE el gerente general del Banco Pichincha, Santiago Bayas, que ve en ese financiamiento un impacto virtuoso en los hogares, al mejorar su economía familiar.
«Hemos buscado entrar en sectores que han sido desatendidos del sistema financiero. Queremos incluirlos y que personas de bajos recursos económicos puedan acceder a servicios financieros», apuntó Bayas.
Bajo esa premisa, el banco ha desarrollado «Mi Vecino», una red de más de 8.000 «corresponsales no bancarios», negocios de barrio que prestan servicios bancarios en periferias de las ciudades o zonas rurales, donde algunos se conectan vía internet satelital.
En el campo, dónde el banco incorporó 52.000 clientes en 2022, ha apostado por las cadenas de valor, como un programa de financiamiento lanzado este jueves para productores lácteos, y ha impulsado la productividad mediante una alianza con Rabobank, banco líder en el sector rural de una potencia agrícola como Países Bajos.
DE LA MANO DE FLORÍCOLA DESDE SU NACIMIENTO
Dentro del sector agrícola, Gloria Guachamín y su esposo Andrés Guerra han consolidado a Floraroma como una importante empresa florícola, uno de los principales sectores exportadores de Ecuador, y envían rosas a Estados Unidos, España, Francia, Portugal, Francia, Italia, Rusia, China y Kazajistán.
Luego de adquirir un terreno al Banco Pichincha en 2006 para su primera plantación, esta compañía ha ido ampliando su superficie de cultivos con varios créditos de la entidad financiera hasta alcanzar actualmente unas 60 hectáreas en producción, y ha pasado de 10 empleados a unos 450 actualmente, casi la mitad mujeres.
«Realmente hemos crecido poco a poco. Ellos han creído en nosotros, y nosotros hemos sabido responder», manifestó a EFE Guachamín, quien espera que le pueda ser aprobado un nuevo crédito para adquirir un terreno «mucho más grande» y ampliar las plantaciones en por lo menos 40 hectáreas más.
«Todo este tiempo ha servido para especializarnos en producción y comercialización de rosas, y pienso que lo hemos hecho bien», dijo la gerente de ventas de esta empresa, que cultiva 80 variedades de rosas en Cayambe, parte de la provincia de Pichincha, cuya capital es Quito.
Ahora, tras el premio, el banco auguró «metas ambiciosas», como eliminar el uso de efectivo con un impulso a la digitalización, a través de la billetera digital «deuna!».
«El gran desafío es incluir a más ecuatorianos para que accedan a servicios financieros y mejorar sus condiciones de vida», concluyó el gerente general de la institución financiera.