Ciudad de México, 25 oct (EFE).- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, rechazó este lunes negociar su proyecto de presupuesto de 2022 con el opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI) a cambio de votos para su polémica reforma eléctrica.
“No, eso es politiquería. Eso es lo que hacían antes, que se encerraban, negociaban en la cúpula, a espaldas del pueblo y siempre se ponían de acuerdo porque les iba bien a los de arriba, pero les iba muy mal a los de abajo», dijo a pregunta expresa en su rueda de prensa matutina.
Sus declaraciones ocurren mientras el Congreso está por discutir el proyecto de presupuesto que el Gobierno entregó el pasado 1 de septiembre para 2022 y la reforma eléctrica que López Obrador envió a finales de septiembre para limitar la participación privada en el sector.
La alianza de partidos del presidente conservó tras las elecciones intermedias del 6 de junio, la mayoría simple de la Cámara de Diputados, pero perdió la mayoría calificada de dos tercios que necesita para reformas constitucionales como la del sector eléctrico.
Aun así, el mandatario prometió que no habrá «ningún tipo de negociación que afecte al pueblo”.
“No (habrá moneda de cambio) porque se necesita transformar al país, no dar tregua al combate de la corrupción, que es el primer problema del país”, contestó a los cuestionamientos de la prensa.
La reforma eléctrica de López Obrador causa controversia porque entrega un mínimo de 54 % de la generación eléctrica a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), empresa del Estado, y desaparece los reguladores autónomos de la energía.
También nacionaliza el litio y cambia el criterio del despacho de electricidad para priorizar siempre las plantas hidroeléctricas y de combustibles fósiles de la CFE sobre las eólicas y solares de privados.
“La reforma eléctrica que estamos planteando es para beneficio del pueblo. Y además se les está dejando el 46 % del mercado. No hay ninguna expropiación”, defendió el mandatario.
El PRI y López Obrador se han mostrado abiertos a ajustar disposiciones de la reforma, pero el presidente rechazó modificar su presupuesto a cambio de estos votos.
El proyecto económico del Gobierno prioriza las Fuerzas Armadas y los programas sociales y obras insignia del presidente, como el Tren Maya y al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles de Ciudad de México.
“El proyecto de presupuesto que nosotros enviamos tiene que ver con la transformación de México y es distinto a lo que ellos impusieron y llevaron a cabo durante muchos años”, sostuvo.
El mandatario reafirmó que no está dispuesto a ceder en su proyecto económico.
“No se pueden quitar recursos al pueblo ni se puede detener el desarrollo del país para beneficiar a minorías”, manifestó.