Ciudad de México, 22 oct (EFE).- La Secretaría de Turismo (Sectur) de México estimó este domingo un incremento del 1,4 % en turistas que se hospeden en hoteles por las festividades relacionadas con el Día de Muertos en comparación con 2019, el año anterior a la pandemia de covid-19.
El secretario de Turismo, Miguel Torruco, indicó en un comunicado que prevé la llegada de 2,36 millones de turistas a hoteles en el periodo entre el 27 de octubre y el 2 de noviembre.
En total, el turismo vinculado con el Día de Muertos, que México celebra el 1 y 2 de noviembre, dejará ingresos por consumo de servicios turísticos de 41.198 millones de pesos (2.258,6 millones de dólares), estimó la Sectur.
Torruco también pronosticó ingresos por concepto de hospedaje de 3.751 millones de pesos, con una ocupación hotelera a nivel nacional de 58,3 %, esto es 1,4 puntos porcentuales más ante el mismo periodo de 2022, cuando la ocupación durante estas festividades fue de 56,9 %.
El secretario agregó que uno de cada cuatro del total de turistas estimados que llegan a hotel, el 26,1 %, serán internacionales, el equivalente a 619.000.
El comunicado también previó que, en esta temporada, 2,69 millones de mexicanos se alojen con familiares y amigos, por lo que la expectativa es un total de 4,44 millones de turistas nacionales en las festividades.
«El Día de Muertos es uno de los principales motivadores de viaje de turistas hacia nuestro país, y desde el 2008, fue catalogada como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, por la Unesco», destacó Torruco.
La Sectur enunció como una de las actividades más representativas el Desfile de Día de Muertos en Ciudad de México, que este año se realizará el 4 de noviembre.
Asimismo, en San Andrés Mixquic, en la capital mexicana, ocurre la Alumbrada, en la que la luz de los cirios y veladoras del panteón es la única iluminación del lugar.
Resaltó también que en Janitzio, Michoacán, se realiza una de las festividades más representativas de Día de Muertos, con el tradicional Desfile de Canoas con redes de mariposa llenas de luz, mientras que el panteón se cubre con los altares y se ilumina con velas que acompañan a las familias que esperan a sus fallecidos.
Y en Oaxaca, personas disfrazadas de calacas o catrinas representan a las almas del purgatorio con comparsas y música en la calle.