La Paz, 12 ago (EFE).- El presidente boliviano, Luis Arce, presentó este sábado la tercera edición de su libro sobre el modelo económico aplicado en Bolivia desde 2006 en el que argumenta que «sí es posible hacer las cosas diferentes» y anunció que está escribiendo un segundo tomo sobre la economía tras la pandemia.
Durante la Feria Internacional del Libro de La Paz, Arce presentó «Un modelo económico justo y exitoso. La economía boliviana 2006-2019», y los comentarios estuvieron a cargo del profesor mexicano Gregorio Vidal.
El libro aborda el Modelo Económico Social Comunitario Productivo que se aplica desde 2006 en el país cuando Arce fue ministro de Economía del entonces presidente Evo Morales (2006-2019).
El mandatario destacó que el modelo es producto de la lucha del pueblo boliviano que él comenzó a teorizar desde que estaba en la universidad en el que inicialmente cuestionó el «modelo neoliberal» que se aplicaba en Bolivia.
Sostuvo que hay «alternativas» al neoliberalismo y que el modelo económico aplicado en Bolivia muestra que «sí es posible hacer las cosas diferentes, pero con resultados positivos especialmente para la población».
Arce indicó que el modelo económico de Bolivia «apunta a la sustitución de importaciones», lo cual está «obligando a producir» y a que el país se «industrialice» para «aprovechar lo que tenemos», como el litio.
También enfatizó en la soberanía alimentaria que debe ser desde la semilla y destacó la «bolivianización» de la economía que ya no depende del dólar.
El mandatario boliviano también anunció que ya está escribiendo el segundo tomo del libro que está enfocado en analizar cómo se ha enfrentado la pandemia y la postpandemia en la economía.
Arce espera que este libro sea un «aporte» para la «experiencia mundial» de cómo se puede «encarar» la economía escuchando las necesidades del pueblo y que hay otros caminos «exitosos» alejados del neoliberalismo.
Bolivia ha mantenido en los últimos años un modelo económico en base a la inversión pública, el pago de subsidios y un tipo de cambio fijo desde 2011.
En el último año el modelo ha sido cuestionado por varios analistas mientras que las calificadoras de riesgo emitieron el pasado semestre informes negativos sobre la economía del país por la caída de las reservas, la escasez de los dólares y la «defensa insostenible» de la paridad del tipo de cambio con esa divisa.