Según Bloomberg, las acciones enfrentaron dificultades para encontrar una dirección clara, mientras que los bonos subían y el dólar caía, en un contexto marcado por la cercanía de las elecciones presidenciales en Estados Unidos y la expectativa de la próxima decisión de la Reserva Federal.
En vísperas de las reñidas elecciones, los mercados de opciones reflejan una postura defensiva en Wall Street. Varias encuestas muestran una competencia cerrada entre Donald Trump y Kamala Harris, lo que sugiere volatilidad en el horizonte ante la posibilidad de un recuento prolongado en caso de un resultado disputado. Las acciones mostraron poca estabilidad, los rendimientos de los bonos del Tesoro cayeron a lo largo de la curva y el dólar se debilitó hasta su nivel más bajo desde agosto.
Otro desafío para los inversionistas es la cantidad de catalizadores adicionales en torno a las elecciones, que podrían influir en el mercado. El día de votación será rápidamente seguido por la decisión de la Fed y la conferencia de prensa de Jerome Powell, en la que se espera una actualización sobre las tasas de interés. Además, muchas empresas estadounidenses aún deben reportar sus ganancias.
En cuanto a los principales índices bursátiles, el S&P 500 y el Nasdaq 100 mostraron pocos cambios, mientras que el Dow Jones cayó un 0,5% y el MSCI World permaneció prácticamente estable.
En el mercado de bonos, el rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años cayó siete puntos básicos hasta el 4,31%, el de los bonos alemanes bajaron un punto básico, situándose en 2,39%, mientras que los bonos británicos avanzaron un punto básico hasta alcanzar el 4,46%.