Madrid, 27 oct (EFE).- El Banco Santander obtuvo en Brasil un beneficio ordinario de 1.762 millones de euros hasta septiembre, un 29 % más que un año antes, con lo que se mantuvo como uno de los principales motores del grupo, aunque esta vez le superó EE. UU., que cuadruplicó sus ganancias y alcanzó los 1.788 millones.
El Santander ganó en todo el mundo 5.849 millones de euros y se alejó un poco más de las pérdidas de 9.048 millones registradas hasta septiembre de 2020, cuando notó el impacto de las provisiones y otros ajustes de valoración que tuvo que realizar para afrontar las consecuencias de la pandemia.
Pese al traspié de Brasil en esta ocasión, el área de Sudamérica, a la que pertenece, fue la que ganó más dinero, 2.471 millones de euros (+31 %), seguida de Europa, con 2.293 millones de euros, casi el doble que un año antes, y de Norteamérica, que incluye EE. UU. y que creció más del doble (+122 %) hasta los 2.288 millones.
Según explica la entidad al supervisor español, la economía de Brasil continuó su recuperación tras la reapertura del sector servicios, «gracias al progreso en la vacunación y la mejora de la movilidad», aunque los problemas de suministro internacionales lastraron el crecimiento de la industria.
El Santander siguió incrementando su base de clientes en ese país tras captar más de 1,5 millones solo en el último trimestre y elevar su vinculación. Asimismo, mantuvo el fuerte ritmo de producción de hipotecas e impulsó el crecimiento de su negocio digital.
Los ingresos subieron un 10 %, impulsados por la buena evolución del margen de intereses, que creció un 12 % por los mayores volúmenes de negocio y por la aportación de las comisiones.
Los costes aumentaron un 1 %, por debajo de la inflación, con lo que el margen neto creció un 14 % y la eficiencia mejoró en 2,5 puntos, hasta el 29,3 %.
En cuanto a los volúmenes, los préstamos y anticipos a la clientela (brutos) crecieron un 13 %, gracias al negocio de particulares y pymes, mientras los depósitos de la clientela crecieron un 3 %, impulsados por los depósitos a plazo (+4 %).
RESTO DE SUDAMÉRICA (CHILE, ARGENTINA, URUGUAY Y PERÚ)
En Chile, el Santander logró un beneficio ordinario atribuido de unos 463 millones de euros, un 72 % más que un año antes. Los ingresos aumentaron un 8 %, gracias a la subida del 12 % del margen de intereses y al incremento del 20 % de los ingresos por comisiones.
Los costes subieron el 2 %, por debajo de la inflación, y las dotaciones se redujeron un 48 % debido a los mayores cargos relacionados con la pandemia realizados en 2020.
En Argentina, el beneficio aumentó un 12 %, hasta 180 millones de euros, con un 32 % más de ingresos, apoyados en el margen de intereses y la recuperación de las comisiones, que compensaron el impacto derivado de la inflación.
Los costes aumentaron un 44 %, afectados por la inflación y el incremento salarial, en tanto que las dotaciones por insolvencias bajaron un 36 % en comparación con las hechas en 2020 por la pandemia.
En Uruguay, el beneficio fue de 80 millones de euros, un 21 % menos, con menores ingresos por la caída de los tipos y mayores ganancias por comisiones, que crecen un 13 %, aunque los costes aumentan un 9 % «muy impactados por la inflación».
En Perú, el beneficio se elevó un 16 %, hasta 46 millones de euros, y en Colombia alcanzó 17 millones tras crecer un 17 % interanual.
NORTEAMÉRICA (ESTADOS UNIDOS Y MÉXICO)
Estados Unidos, fue el país que ganó más dinero en este periodo, con 1.788 millones de euros, cuatro veces más si no se incluye el impacto de las ventas de la cartera de Bluestem y Puerto Rico y un 6 % más si se incluyen.
Los costes crecieron un 12 % por las inversiones para la transformación digital de la entidad, al tiempo que las dotaciones por insolvencias cayeron un 79 % por la mejora de las perspectivas macroeconómicas, las medidas de alivio de préstamos y la solidez de los precios de los vehículos usados.
En México, el banco ganó 602 millones, un 2 % más, con una caída del 4 % en el margen de intereses, reflejo de unos tipos de interés más bajos y de los menores volúmenes de cartera. Las comisiones subieron un 5 % y los costes, un 3 %, principalmente los relacionados con la tecnología.
