La liquidez del sistema financiero alcanzó un valor de G. 46,5 billones en julio del 2022, con una reducción del 14,5% frente al mismo mes del año pasado y una caída de 0,67% en términos mensuales, según un informe elaborado por Investor.
Al considerar la liquidez por moneda, se observa que la denominada en dólares refleja una mayor reducción que en guaraníes. Por un lado, en julio del 2022 se observó que la liquidez en dólares experimentó una variación interanual de -23,5%, alcanzando un nivel de G. 20,3 billones.
La liquidez del sistema financiero en dólares sigue experimentando caídas en mayor proporción y a mayor ritmo que la de moneda nacional, en una tendencia observada desde mayo del presente año, agrega el reporte de Investor.
Por otro lado, la liquidez en moneda nacional evidenció una reducción del 5,8% y llegó a un nivel de G. 26,1 billones.
De acuerdo con los especialistas del rubro bancario, los depósitos vienen cayendo de manera pronunciada luego de los efectos que tuvo primeramente los resultados de la zafra y su efecto derrame en la economía. A esto se sumó una inflación que llegó a ubicarse hasta un 11,8%, lo que redujo las posibilidades de ahorro para las personas ya que sus ingresos se vieron afectados con la subida de precios.
Además de eso, el objetivo del Banco Central del Paraguay (BCP) consistió en retirar el exceso de liquidez de la economía y destinarla a los bancos de manera a reducir presiones sobre la inflación; para ello, elevaron la tasa pasiva de manera a incentivar los depósitos, sin embargo, este comportamiento no se ha observado en los últimos meses. En el mes de septiembre, la cartera de ahorros registró una caída de 0,5%, mientras que los créditos aumentaron a un ritmo de 13,5% interanual.
Es importante tener en cuenta, además, el aumento de la morosidad del sistema, que actualmente se ubica en un 3,12%, la tasa más elevada de los últimos dos años.
Durante la pandemia, la liquidez en los bancos registró un exceso luego de las medidas que ejecutó el BCP para inyectarla en la economía. En ese proceso se dio una reducción del encaje legal a 9% y la tasa de política monetaria bajó hasta un histórico 0,75%.
Es importante mencionar que el encaje legal es la cantidad de recursos que los bancos deben resguardar o mantener ante el BCP, bajo una tasa específica. Al reducirse la tasa de encaje legal, las entidades pueden disponer de mayor liquidez, la cual fue utilizada para otorgar créditos a bajas tasas.
Pedido del sistema
En el último informe de Situación General del Crédito, elaborado por el BCP, se menciona a su vez que una de las maneras para mejorar las colocaciones de crédito consiste en que la banca matriz inyecte mayor liquidez al sistema.
De acuerdo al último informe de indicadores financieros del BCP, el indicador de liquidez (recursos disponibles más inversiones temporales respecto a los depósitos) a septiembre se encuentra en un nivel de 35,62%, mientras que la solvencia se ubica en 18,8%.
Según el informe de Situación General del Crédito, el motivo que dificulta la concesión de préstamos a largo plazo es principalmente la escasez de depósitos a largo plazo, falta de garantías y escasez de proyectos de largo plazo.
Desde la visión de los tomadores de créditos, reiteradamente mencionan que existe mucha burocracia, que las tasas de interés son muy elevadas y que los requerimientos son muy complejos.
Acciones para aumentar colocaciones
El mismo informe explica que entre los factores para fomentar los créditos, se observa que el 26% respondió que es necesario obtener más información sobre los prestatarios, proyectos de inversión rentable (en 19%) y que el BCP inyecte mayor liquidez al sistema bancario en (12%).
Estos resultados pueden estar explicados por una menor colocación de crédito y una caída de los depósitos, el cual sigue siendo la principal fuente de fondeo para los préstamos en los bancos.
Proyecciones
A pesar del escenario local complejo, se espera que en el corto plazo las entidades financieras mejoren ligeramente los niveles de liquidez en comparación con los actuales. Estas proyecciones implicarían una variación interanual de -9,7% en noviembre del 2022.
De la misma manera, se proyecta una mayor variación en la moneda extranjera, sin embargo, seguirán su tendencia bajista.