El informe de inflación del mes de julio sorprendió a todos en Estados Unidos, con una pequeña baja a 8,5% desde el nivel de 9,1% que alcanzó en el mes anterior. De todas formas, sigue quedando cerca del nivel histórico y aún es la tercera cifra más elevada en lo que va del año.
El índice mensual de precios al consumidor quedó en cero y la reacción de Wall Street fue positiva, por lo que se espera una apertura fuerte en los mercados. Los futuros de las acciones subieron en 0,9% en promedio en Industrial Dow Jones y 1,2% positivo para S&P 500.
Los números de inflación siguen siendo altos, pero menores al pronóstico del mercado de 8,7%.
Mientras, el índice de precios de la energía sigue en aumento, con una variación de 32,9%, luego de que en junio se reportara un incremento de 41,6%. Esto se debe principalmente a la desaceleración de los costos del combustible.
Otras indicaciones a la baja se dieron con el gas natural, ya que reportó una suba de 30,5% en julio, a diferencia del 38,4% registrado. Los vehículos nuevos cerraron julio con un encarecimiento de 10,4% en vez del 11,4% del mes pasado; y las tarifas aéreas se encuentran en 27,7% luego del 34,1% al que llegaron en junio.
Estas cifras pronostican una señal de bienvenida a las medidas tomadas por la Reserva Federal, que buscaba justamente enfriar los precios y controlar la demanda de los consumidores.
Inflación acumulada 12 meses
Fuente: Trading Economics- U.S Bureau of Labor Statistics
La inflación no deja a los pobladores disfrutar de los aumentos salariales que se produjeron en los últimos meses, pues estos ajustes fueron menores a la inflación; por lo tanto, el promedio de los ingresos reales ha disminuido en 0,5% en julio versus el mes anterior y, sobre la base anual, las ganancias reales cayeron 3%.
La baja de la tasa de inflación da un pequeño suspiro a la economía estadounidense, que a finales de julio entró en los índices de una recesión técnica luego de dos trimestres de caída del producto interno bruto.