En su sesión de este miércoles, la Cámara de Diputados finalmente sancionó el proyecto de ley “Que establece medidas temporales para incentivar la reactivación turística y la apertura del Paraguay al mundo”.
Esta normativa tiene como principal objetivo eliminar por un periodo de tres años el cobro de visas a ciudadanos estadounidenses, canadienses, australianos y neozelandeses que deseen hacer turismo en el país por un periodo de hasta noventa días.
Aunque todavía falta la promulgación por parte del Poder Ejecutivo, esta notica ha sido bien recibida entre agentes del sector turístico, quienes en reiteradas ocasiones han apuntado la importancia de esta ley para el fomento del ingreso de turistas que llegan hasta las Cataratas de Iguazú y no pasan al lado paraguayo por este trámite burocrático que resultaba molesto, según denunciaban.
André Gayol, director de StayPy, indicó que desde el sector se encuentran contentos de que Diputados haya aprobado finalmente la versión del Senado y recordó que la medida apunta solo a turistas por hasta noventa días. De esta manera, se omitirá al menos por tres años la política de “reciprocidad” que ha tenido nuestro país para con aquellos que cobran una visa a los ciudadanos paraguayos.
“El objetivo es reactivar el turismo y generar incentivos para que ciudadanos de estas nacionalidades vengan a Paraguay, aprovechando que ahora tenemos vuelo directo a Estados Unidos y el gran flujo de llegada a las Cataratas que nosotros no estamos pudiendo captar por varios motivos, pero principalmente porque somos el único país de la región que les sigue cobrando USD 160 por ingresar”, expresó.
También afirmó que Paraguay tiene una gran potencialidad turística para ofrecer al mundo que no es aprovechada por este motivo, entre otros, como por ejemplo las cataratas del Monday y del Ñacunday. Mencionó al turismo de compras como otra opción para ofrecer a estos ciudadanos que llegan hasta Brasil y Argentina, que ya no tendrán esta barrera en caso de aprobación.
Cabe recordar que el Poder Ejecutivo no ha acompañado este proceso, por la posición adoptada en el Ministerio de Relaciones Exteriores; esta institución posee un ingreso de USD 1,5 millones anuales en concepto de las visas. Sin embargo, este dinero sería restituido a la institución por medio de redireccionamientos en el Presupuesto General de la Nación.