En su más reciente boletín mensual “Escenario Macro Latam”, el banco Itaú observa que el Banco Central del Paraguay (BCP) finalizará su ciclo de aumento de la tasa de política monetaria (TPM) en un nivel de 8,25% en el 2022, con una última suba de 25 puntos básicos (pb) prevista para este agosto.
No obstante, la entidad dice que existen riesgos de que la banca matriz opte por terminar el ciclo ya en el actual 8%, “dada la cierta estabilización de la expectativas de la inflación”, agrega como argumento; de darse este escenario, ya no habría subas en la tasa de referencia tras la última de 25 pb que se aplicó en julio pasado.
Para el 2023, estiman que la tasa de política monetaria retrocederá hasta 7,25%.
El incremento de la TPM se inició en agosto del 2021, cuando el BCP dispuso la suba de 25 pb y dejó en 1% a este indicador. En esa oportunidad, había culminado un año entero de tener a esta tasa en el nivel históricamente bajo de 0,75% al que llegó para combatir los efectos económicos de la pandemia; esto, a su vez, tras dos años consecutivos de recortes desde el 5,25% en que había cerrado el 2018.
En lo que respecta a la inflación, Itaú mantiene sin cambios su previsión para este año, en 8,8%. “La reciente reducción de los precios de los combustibles probablemente ayudará a que la inflación continúe con una tendencia a la baja durante el resto del año”, adelanta el banco.
Cabe señalar que la inflación interanual de julio se ubicó en 11,1%, con una leve disminución en relación con el interanual de junio pasado, mes en que estuvo en 11,6%. Para el 2023, creen que la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) se ubicará en 4,7%, aún por encima de la meta del 4% que tiene la banca matriz.
Previsión del PIB y déficit fiscal
Por otra parte, el banco de origen brasilero mantuvo su previsión con respecto al Producto Interno Bruto (PIB) paraguayo, que consiste en una caída de 1% para el cierre de este año. En lo que respecta al próximo año, proyectan un crecimiento del PIB de 5%; esto “suponiendo una normalización de la producción agrícola tras la grave sequía de 2022”, advierte.
Mientras tanto, la entidad revisó a la baja su pronóstico de déficit fiscal para el 2022, al 3,5% del PIB desde el 3,8% del PIB vaticinado anteriormente, nivel aún más elevado que el objetivo del Ministerio de Hacienda de 3% del PIB. Fundamenta esta decisión en que existe un recorte más rápido de lo esperado en los gastos.
Itaú recuerda, también, que la agencia Moody’s mantuvo la calificación Ba1 de la deuda soberana Paraguaya, pero cambió la perspectiva a “positiva” desde “estable”. Moody’s destacó el sólido crecimiento y la política fiscal prudente, lo que se refleja en métricas de deuda favorables, recuerda el reporte del banco.
Por último, en referencia al tipo de cambio, estima que estará en PYG 7,000/USD para fin de año. “Esperamos que el guaraní se deprecie desde los niveles actuales, impulsado por condiciones financieras externas más estrictas y una probable depreciación adicional del real brasilero”, sostiene la firma bancaria.
