Los préstamos refinanciados, reestructurados y renovados en los bancos mostraron un leve descenso al cierre de septiembre, en comparación con el mes de agosto. Esta cartera en total alcanza unos USD 2.384 millones, representando el 13,9% del total de préstamos del sistema bancario, mostrando una disminución respecto al 14.27% del mes anterior.
En cuanto a la composición de esta cartera, los préstamos renovados representan el 81%, los refinanciados el 5%, y los reestructurados el 13%.
Estos datos reflejan una tendencia a la baja en la cartera RRR al cierre de septiembre, ya que, en el mismo mes del año anterior, el nivel era del 14.93%. Si bien la reducción es mínima, esta trayectoria concuerda con otros indicadores positivos como una menor morosidad y un aumento en depósitos y créditos, lo que refleja una mejora en la calidad del crédito.
Para clasificar estas carteras, se considera que:
Los préstamos renovados incluyen aquellos con un atraso de entre 1 y 60 días, que han cubierto intereses y otros cargos exigibles, y por los cuales se suspenden los días de atraso.
Los préstamos refinanciados presentan un atraso superior a 61 días, cubren intereses vencidos y otros cargos, y al menos el 10% del capital vencido, lo que permite suspender los días de atraso.
Los préstamos reestructurados implican una modificación de las condiciones originales del crédito (plazo, cuota, o tasa). Siempre que cumplan con los pagos exigidos de acuerdo con su morosidad, también se suspenden los días de atraso.
En conjunto, estos movimientos demuestran una estabilización en el sector financiero que se traduce en una mayor calidad del crédito.