De acuerdo a Bloomberg, las acciones estadounidenses registraron movimientos en los últimos minutos de la sesión del viernes, impulsados por el vencimiento de contratos de derivados y un importante reequilibrio en los mercados. El oro alcanzó un máximo histórico, mientras los inversores evaluaban el próximo paso de la política monetaria del banco central.
El S&P 500 y el Nasdaq 100 cerraron la jornada con una ligera caída del 0,2%, después de que el índice más amplio alcanzara su 39.º máximo histórico en 2024. El Dow Jones Industrial Average, en cambio, subió un 0,1%, logrando un cierre récord. En total, se negociaron más de 20.000 millones de acciones, convirtiendo la jornada en la más activa desde enero de 2021.
Aunque las acciones lograron extender su racha alcista por segunda semana consecutiva, los principales índices perdieron impulso hacia el cierre debido a varios informes de ganancias decepcionantes. FedEx Corp. se desplomó un 15% tras no cumplir las expectativas de ganancias y advertir sobre una desaceleración en su negocio. Lennar Corp. también registró una caída después de no alcanzar las previsiones de pedidos de viviendas.
Las acciones estadounidenses cerraron con ligeras variaciones: el S&P 500 y el Nasdaq 100 retrocedieron un 0,2%, mientras que el Dow Jones mostró pocos cambios y el índice MSCI World cayó un 0,3%.
En el mercado de bonos, el rendimiento del Tesoro americano a 10 años subió dos puntos básicos hasta el 3,73%, el de los bonos alemanes y británicos a 10 años también subieron un punto básico, alcanzando el 2,21% y el 3,90%, respectivamente.