Si bien Paraguay aún no se caracteriza por ser un país industrializado, en los últimos años esta actividad ha mostrado un crecimiento paulatino y constante, con el desembargo de nuevas inversiones referentes a este rubro.
De acuerdo con Francisco Ruíz Díaz, viceministro de Industria, este sector económico ha logrado posicionarse en la última década como un actor importante dentro de la economía local, tanto así que para el sector manufacturero se espera un crecimiento del 9% en este 2023, a pesar de contar con un escenario relativamente conservador.
Es por ello que Ruíz indicó que el próximo titular del Ministerio de Industria y Comercio (MIC), Javier Giménez, tendrá como desafío seguir impulsando el crecimiento del sector industrial del país, como así también modernizar las formas de negociación para aumentar la exportación.
Igualmente, el viceministro sostiene que las reglas ya están bastante claras para poder ejecutar las acciones necesarias para poder aumentar la producción del país, por lo que resaltó que algunos de los logros conquistados es el aumento de las inversiones, la creación de más de 8.000 puestos de trabajo con la llegada de las empresas maquiladoras y el aumento de las exportaciones industriales.
– ¿Cuáles son algunos de los desafíos que estaría teniendo el futuro ministro del MIC al frente de la institución y cuáles son los primeros temas que debe de tratar?
Debemos resaltar una estadística muy relevante. Cuando uno hace un cálculo de crecimiento industrial entre el periodo de 1991 y 2003, encuentra que el crecimiento fue del 0,9%; y si uno se hace la pregunta de en cuánto tiempo yo duplicaría mi producción industrial, el ejercicio da como resultado unos 90 años. O sea que si yo me ubico en el periodo de 1990, principios de 2000, yo tendría que esperar 90 años para que se duplique mi producción industrial.
Sin embargo, con las reformas que se hicieron desde el 2003 en adelante, y que se han sostenido, uno encuentra que la tasa de producción del sector industrial es del 4%, eso en término de duplicación quiere decir que cada 18 años vamos a duplicar la producción. Es decir, que si estoy en los 90’, tendría que esperar unos 90 años para ver aumentar mi producción, pero si ya me ubico en este momento de la historia, debería esperar 18 años nada más para ver el doble de la producción industrial.
Entonces, el primer desafío que ya incluso, tengo entendido, que el nuevo Gobierno se está auto imponiendo es hacer crecer la producción industrial al 6%. Si yo hago crecer la producción de este rubro en esta cifra, en 12 años ya duplicaría mi producción, es decir, todo el Producto Interno Bruto (PIB) industrial. Entonces, el primer desafío del próximo titular del MIC es hacer crecer este rubro. En este punto debemos resaltar que ya están todos los instrumentos industriales para promover la inversión y aumentar las capacidades productivas, ya se tienen reglas muy claras, ya sea en materia tributaria, como también ya se cuenta con una estabilidad económica y política. El escenario ya está completamente preparado, lo que queda de acá en adelante es modernizar.
Lo que se debe modernizar en primer lugar son los instrumentos de negociación, como también el proceso de exportación, que le permitió a los países asiáticos ser la potencia industrial que hoy en día son, como Corea del Sur, Japón, Taiwán, entre otros. Entonces, debemos avanzar hacia la modernización de nuestros instrumentos, porque ya hay inversionistas y esto viene porque existe una estabilidad macroeconómica. Otro de los desafíos para la siguiente gobernanza es encontrar nuevos mercados. Estamos viendo que el presidente electo (Santiago Peña) viene manteniendo reuniones de forma corrida hacia los países árabes, asiáticos, entre otras partes del mundo, a los efectos de buscar otros mercados alternativos al Mercosur (Mercado Común del Sur). Incluso con la apertura de nuevos comercios internacionales, podemos aumentar nuestra capacidad de producción, ya que tendremos que abastecer más mercados, lo que también hará que incrementemos nuestras exportaciones industriales.
– Con relación a la búsqueda de nuevos mercados, en los últimos meses se ha hablado sobre la posibilidad de negociar con otros países del continente asiático ¿Cuál es su opinión al respecto, teniendo en cuenta que Taiwán es un aliado estratégico de Paraguay?
Es una respuesta más política, porque corresponde al ámbito del relacionamiento internacional, pero te puedo adelantar que uno de los principales inconvenientes para poder avanzar en el relacionamiento con China tiene que ver con los valores que tenemos como sociedad. Paraguay es un país que está ratificando permanentemente su modelo de libertad de elegir, ya sea lo vinculado con temas relacionados al sector privado, no imponerlo. Para nuestro país, el modelo de la imposición política y económica acabó en los años 90’; desde esa fecha, su modelo se sustenta en tres modelos principales: respeto a la propiedad privada y la seguridad jurídica, la libertad de elegir y, por último, un trabajo coordinado entre el sector público-privado. Es por ello que este modelo que nosotros tenemos es incompatible con el modelo con el que se manejan, por lo que hasta que no veamos un cambio o congeniamos con dicho modelo, es muy difícil que la nación construya un relacionamiento con China.
En cuanto a Taiwán, es fácil de armar un relacionamiento porque coincide con nuestros valores de libertad en el mercado y coincide con nuestros principios y modelo económico. Como se ha dicho en otras ocasiones, bienvenidos sean todos los inversionistas, pero sin ningún tipo de condicionamiento. Por lo tanto, lo de China, más allá de que sea una cuestión vinculada a la restricción, tiene que ver además con una incompatibilidad de los modelos que tenemos, en donde el país asiático restringe la libertad de los sectores, hecho que Paraguay fomenta de sobremanera.
– ¿Cuáles son algunos de los logros que se conquistaron durante este mandato frente al MIC?
En este periodo tuvimos muchos logros. En primer lugar, debemos recalcar que estamos alcanzando un récord en materia de producción industrial. Este año estamos estimando llegar a los USD 8.400 millones, cifras que son históricas, en comparación a 15 a 20 años atrás, en donde tan solo se llegaba a USD 1.130 millones, se ve un gran crecimiento.
Así también, otro de los logros es lo que respecta en materia de empleo, ya que en el indicador principalmente de promoción de inversiones, vemos que tenemos un aumento importante para la contratación de nueva mano de obra, que se verá reflejado en los próximos meses.
En las exportaciones industriales también estamos alcanzando niveles récords. En la actualidad, el 66% de todo lo que Paraguay envía al exterior es con transformación industrial, anteriormente eso tan solo representaba un tercio, pero hoy en día es dos tercios. Con esto, solo nos queda el desafío de industrializar unos USD 3.600 millones de productos que no están transformados, principalmente la soja, por lo que debemos de ver mecanismos para incentivar que esto que se exporta en estado natural sea transformado.
Otro de los logros principales es el crecimiento que se viene observando en la Región Occidental, que en los próximos años se perfila en ser uno de los principales lugares de crecimiento en materia de agroindustrialización, mientras que la Región Oriental será el principal sector de crecimiento en manufactura.