Paraguay avanza hacia la implementación de un impuesto al carbono como parte de sus compromisos con organismos internacionales.
Según el último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Gobierno Nacional trabaja en un proyecto de ley que establecerá un impuesto explícito al carbono, reemplazando los impuestos selectivos actuales sobre el consumo de combustibles líquidos.
El informe, preparado por funcionarios del FMI y presentado al Directorio Ejecutivo para su revisión el 27 de junio de 2025, se basa en conversaciones con autoridades paraguayas que culminaron el 13 de mayo.
Este documento evalúa el progreso del país dentro del Instrumento de Coordinación de Políticas y el Servicio de Resiliencia y Sostenibilidad, mecanismos de apoyo para fortalecer la estabilidad macroeconómica y promover reformas ambientales.
De acuerdo con el proyecto, el nuevo impuesto aplicará una tasa equivalente a G. 250.000 por tonelada de CO₂ y abarcará combustibles como diésel, gasolina y gas licuado de petróleo (GLP).
Además, la base imponible cambiará de litros a contenido de carbono, alineándose con estándares internacionales para incentivar la reducción de emisiones.
Asimismo, según el FMI, el borrador de la ley está siendo evaluado técnicamente, considerando los desafíos de su implementación por parte de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios.
Las autoridades prevén ajustar las tasas del impuesto periódicamente, en función de un análisis técnico elaborado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y el Banco Central del Paraguay (BCP), que tendrá en cuenta variables como la inflación, el tipo de cambio y los precios de los combustibles.
SECTOR DE TRANSPORTE
Por otra parte, el informe destaca avances en el sector transporte, con la instalación de ocho estaciones de carga y la incorporación de 30 buses eléctricos en el área metropolitana de Asunción como proyecto piloto.
Según el FMI, estas medidas forman parte de un plan más amplio para electrificar el transporte público y reducir la dependencia de combustibles fósiles importados.
Además, el documento señala que la Superintendencia de Bancos del BCP ya incorporó los riesgos climáticos en su marco de evaluación, reflejando un enfoque integral hacia la sostenibilidad.
También se menciona que Paraguay planea fortalecer incentivos fiscales para vehículos eléctricos, implementando la transición tecnológica de manera gradual para minimizar el impacto tributario.
Finalmente, el FMI valoró estas reformas como pasos importantes para mejorar la resiliencia económica y ambiental del país. Sin embargo, advirtió que su éxito dependerá de un marco legislativo sólido, así como de la coordinación entre las instituciones responsables de ejecutar los cambios previstos.