El portal de noticias de Bloomberg informó que Fitch Ratings, calificadora internacional de riesgos, redujo al grado “basura” (o junk, en inglés) a la valoración de Colombia como sujeto de crédito en el mercado internacional. La decisión se adopta luego de que se archivara en el Congreso el plan para aumentar los impuestos, que a su vez se dio tras las protestas sociales masivas que se opusieron a dicho proyecto.
En este contexto, Fitch recortó la calificación de deuda en moneda extranjera a largo plazo de Colombia, a BB+, un nivel por debajo del grado de inversión, desde su original calificación de BBB-. La rebaja se produjo menos de dos meses después de que S&P Global Ratings también redujera a la nación en su calificación.
Según el informe de Fitch, esta rebaja en la calificación refleja el deterioro de las finanzas públicas colombianas, con grandes déficits fiscales entre el 2020 y el 2022, además de un incremento considerable de la deuda del Gobierno.
Además, se apunta una menor confianza en torno a la capacidad del Gobierno para colocar deuda de manera confiable en los próximos años.
Cabe recordar que el proyecto de reforma fiscal, presentado por el gobierno de Iván Duque para su discusión en el Congreso, buscaba disminuir la pobreza extrema, fomentar el empleo y propiciar la recuperación de la economía golpeada por los efectos de la pandemia del coronavirus, entre otros asuntos, según reportó la agencia EFE. Para esto, se pretendió el aumento de impuestos a bienes y servicios para la clase media, lo que fue repudiado por la población.
Con el proyecto, el Gobierno esperaba recaudar 25 billones de pesos (unos USD 6.850 millones) para un intento por mejorar las finanzas públicas y financiar los programas de asistencia social, cuya demanda se vio incrementada por la pandemia de coronavirus.
La aparición del COVID-19 obligó a realizar confinamientos prolongados en este país y con ello se truncó el normal movimiento de la economía del país.