La Paz, 3 mar (EFE).- Bolivia ha registrado en los últimos días problemas de liquidez en dólares que para el vocero presidencial, Jorge Richter, se debe a un «retiro inusual de divisas» y a una situación motivada por «sectores opositores» para generar una sensación de «inestabilidad» y «desconfianza» hacia el Gobierno.
El retiro de dólares coincidió con los reportes sobre los niveles de las Reservas Internacionales Netas (RIN) que a principios del mes pasado se situaron alrededor de los 3.800 millones de dólares, uno de los niveles más bajos desde 2014, cuando llegaron a los 15.122 millones.
Ante esta situación, algunas entidades financieras han restringido los retiros diarios de hasta 2.000 o 3.000 dólares.
Richter aseguró en una entrevista con EFE que la demanda para conseguir dólares ha estado impulsada por «sectores opositores», que han «instalado» el tema para lograr una sensación de «inestabilidad» y «desconfianza» hacia el Gobierno de Luis Arce.
No obstante, el vocero se refirió también a las «cuentas del país por cobrar» en áreas como los hidrocarburos, principalmente por conceptos de exportaciones de gas natural, cuyos pagos no han tenido la «correspondencia» o continuidad habitual y que ocasionan que el Estado llegue a «resentirse» económicamente.
«Efectivamente, el país ha tenido unas dificultades de contar con la liquidez suficiente» y esto «se está resolviendo ahora» con medidas como créditos, derechos especiales de giro y la compra de divisas por parte del Banco Central de Bolivia (BCB), remarcó Richter.
El Ejecutivo nacional ha enviado al Parlamento varios proyectos de ley para la aprobación de créditos externos que alcanzan los 771,3 millones de dólares, mientras que el BCB introdujo una «exención» al reglamento del encaje legal del 23 de febrero al 6 de marzo».
Por otro lado, en el Parlamento aún se debate la aprobación de la Ley del Oro que tiene la finalidad de fortalecer las RIN mediante la compra directa en el mercado local para su posterior conversión a divisas, iniciativa que ha sido rechazada por la oposición que considera que mermará aún más las reservas internacionales.
«Ya se han tomado unas medidas y esto de la liquidez suficiente (de dólares) se va a tener resuelto en los siguientes días», apuntó el vocero.
Además, la Autoridad del Sistema Financiero (ASFI) ha remarcado que la banca «es solvente, estable (y) goza de fortaleza» y que existe un abastecimiento normal de dólares en el país.
EL MODELO ECONÓMICO
Richter defendió que Bolivia «sigue sosteniendo su modelo económico sin mayores contratiempos» pese a la guerra en Ucrania y los recientes conflictos en Santa Cruz, la mayor región y motor económico del país, lo que se manifiesta con una inflación baja (0,3 % en enero) y el incremento de las exportaciones en 2022.
El vocero destacó las subvenciones estatales, el tipo de cambio fijo y la redistribución de los ingresos, entre otras medidas, pese a los pedidos de algunos sectores de una eliminación progresiva de los subsidios como el de los combustibles y hacer flexible la cotización del dólar.
A su juicio, es «absolutamente importante no llegar a las economías indexadas», ya que implicaría liberar la economía hacia los precios internacionales e «importar» una inflación que finalmente paga la «población».
Richter añadió que no está en planes del Gobierno hacer modificaciones a su política económica y manifestó que la población boliviana «tiene las garantías y la certidumbre que sus recursos, sus créditos y sus inversiones no van a verse en lo más mínimo alteradas».
