Montevideo, 1 may (EFE).- El Gobierno uruguayo está «preocupado» y busca implementar medidas para paliar la afectación en el litoral oeste del país, fronterizo con Argentina, donde los «graves problemas de competitividad» atados a la diferencia cambiaria agudizan el desempleo.
Así lo aseguró este lunes el ministro de Trabajo y Seguridad Social de Uruguay, Pablo Mieres, durante una conferencia de prensa en la que rindió cuentas sobre el estado del trabajo y el empleo en el país en el marco del Día Internacional de los Trabajadores.
«No hay ninguna duda de que el componente de la competitividad, el tipo de cambio y los precios con Argentina está afectando la situación laboral», afirmó el titular de la cartera, quien detalló que se observa «una afectación muy clara» en esa región del país «cuando se estudian los datos del desempleo por departamento (provincia)».
Si bien aseguró que ya se han implementado «algunas» medidas para resolverlo, Mieres, que mencionó haberse reunido recientemente con el Centro Comercial e Industrial del departamento de Salto (oeste), dijo que «hay planteos» que reclaman más acciones.
«Obviamente estamos todos preocupados y buscando encontrar medidas, que dada la magnitud de la diferencia de cambio y de precios con Argentina la sensación siempre va a ser que no son suficientes porque es imposible compensar una magnitud tan enorme de diferencia de precios», expresó.
Si bien no adelantó cuáles serán, el ministro señaló que hay medidas concretas en estudio, pues el tema «está en la mesa de trabajo de la Presidencia» del país suramericano.
«Seguramente tengamos novedades a la brevedad», acotó.
Tras el principal acto de la central sindical, el PIT-CNT, por el 1 de mayo, el Gobierno de Uruguay expresó su «desacuerdo» con ser responsable de un modelo «desigual» pero dijo estar abierto a «construir» diálogo a partir de los «puntos» de coincidencia.
Respecto a los reclamos de los trabajadores, que pidieron un aumento del salario real, así como partidas especiales para los sectores más vulnerables, Mieres afirmó que están alineados con el «compromiso» del Gobierno de la recuperación del salario «a los niveles prepandemia».
«Hay que decir que tanto en el promedio del 2022 como en lo que va del 2023 viene generándose un proceso de recuperación del salario real, eso no es un invento mío, lo dicen los técnicos», acotó quien remarcó también que en la segunda mitad del año, en los consejos de salarios, se acordarán subas para públicos y privados.
Por otro lado, sobre el planteo de reducir la jornada de ocho horas diarias siguiendo el modelo de países como Chile que hizo Abdala, el ministro indicó que «hoy no está arriba de la mesa» pero «en las negociaciones colectivas puede haber sectores que puedan avanzar en eso».