Buenos Aires, 23 jul (EFE).- Argentina espera recaudar 2.000 millones de dólares (unos 1.797 millones de euros) con un nuevo «dólar agro», el resultante de aplicar un valor de 340 pesos a las exportaciones regionales, que incluyen productos como sorgo, cebada, girasol y maíz hasta el 31 de agosto, según anunció este domingo el Ministerio de Economía.
Esta es una de las medidas incluidas en un paquete anunciado horas después de que la cartera y el Fondo Monetario Internacional (FMI) confirmasen que habían alcanzado un entendimiento para cambiar ciertos términos del millonario acuerdo de refinanciación de deuda firmado en 2022 y evitar que el país suramericano, con severos desequilibrios macroeconómicos, entre en mora.
Además del nuevo valor para el «dólar agro» -muy cuestionado en los últimos días por el sector del campo, reunido en Buenos Aires en la 135a. edición de la Expo Rural-, el Gobierno argentino decidió el encarecimiento del precio del «dólar solidario» (tributo que grava la compra de divisa para su ahorro).
Según lo informado, se equiparará el tipo de cambio del «dólar solidario» con el del «dólar tarjeta» (encarece un 75 % el gasto efectuado en el exterior hasta 300 dólares mensuales), actualmente cercano a los 500 pesos, y mantendrá el denominado «dólar Qatar» (recarga un 100 % las compras con crédito o débito en el exterior por más de 300 dólares mensuales), que el viernes cerró con valores entre 560 y 570 pesos.
Además, se generaliza el impuesto país al 7,5 % para todas las importaciones, excepto medicamentos, combustibles, lubricantes, bienes vinculados a la generación de energía, además de insumos y bienes intermedios vinculados a la canasta básica alimentaria, que seguirán sin pagarlo; y los bienes de lujo, que pagan el 30 %.
Este nuevo paquete de medidas tiende a apuntalar las debilitadas reservas argentinas.
Argentina sufre serios desequilibrios macroeconómicos y, además, padeció durante el primer semestre los efectos de una severa sequía que impactó de lleno en sus exportaciones agrícolas -su principal fuente de ingresos-.
Esto ha llevado al país suramericano a experimentar dificultades para cumplir con las metas pactadas con el FMI en el acuerdo de facilidades extendidas logrado en 2022 para refinanciar deudas por 44.000 millones de dólares contraídas con el propio Fondo en 2018 por el entonces Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019).
Del cumplimiento de esas metas depende la aprobación de las revisiones trimestrales que efectúa el FMI, aval necesario para que el organismo gire a Argentina los desembolsos que le permitan pagar los compromisos de deuda con el propio organismo.
Argentina, con escasas reservas monetarias, debe afrontar vencimientos con el FMI por unos 3.400 millones de dólares entre el 31 de julio y el 1 de agosto, por lo que se espera que el «acuerdo a nivel de staff» esté aprobado antes de esas fechas.