Quito, 7 ago (EFE).- La Cámara de Energía de Ecuador (CEDE) calificó este lunes de «una decisión nefasta para los intereses del país» la consulta nacional que se celebrará el próximo 20 de agosto para cesar la explotación de petróleo del Bloque 43-ITT, uno de los principales yacimientos petroleros en la Amazonía del país.
La CEDE indicó en un comunicado que está «en desacuerdo categóricamente con la consulta popular», un inédito plebiscito impulsado por el colectivo ambientalista Yasunidos, que considera imprescindible cesar la extracción de crudo de ese campo para proteger el Parque Nacional Yasuní, uno de los epicentros mundiales de la biodiversidad.
El gremio del sector energético apuntó que «se debe informar a la ciudadanía desde tres ejes fundamentales: económico, ambiental y social, para que puedan ejercer un voto consciente, informado y no politizado».
«Es nuestra obligación contrarrestar la desinformación que circula por diferentes medios de comunicación y que desprestigian a una industria que ha permitido que el país avance», señaló la CEDE.
En ese sentido, mencionó que el Bloque 43-ITT «dinamiza la economía nacional y genera aproximadamente 55.000 fuentes de empleo directo e indirecto, ha permitido el progreso social y económico de las comunidades de la zona, así como obras que mejoran la calidad de vida de quienes habitan en el sector».
«Dejar de extraer aproximadamente 57.000 barriles de petróleo diarios implicaría reducir al menos 1.200 millones de dólares de ingresos netos de la renta anual», apostilló.
Para la CEDE, el cierre de las operaciones en Bloque 43-ITT «llevaría al Gobierno a tomar otras acciones emergentes por no contar con estos recursos, como subir los impuestos, eliminar subsidios o incrementar el precio de la gasolina».
También incidió en que el Estado deberá gasta 500 millones de dólares aproximadamente en el desmantelamiento de los pozos, oleoducto e instalaciones, que ocupan unas 80 hectáreas del millón que abarca el Parque Nacional Yasuní.
Asimismo, en caso de ganar el «Sí» a cesar la explotación, auguró que «el país afrontaría demandas cuantiosas por incumplimiento de contratos y la reputación nacional se vería afectada en la industria petrolera a nivel mundial, pues no sería un país atractivo para inversión extranjera».
«¿Creen que es justo que, de los 96 países petroleros, solamente Ecuador deba mermar su economía de manera tan radical en apoyo al cambio climático?», se cuestionó la CEDE.
Del Bloque 43-ITT salen cada día aproximadamente 55.000 barriles de petróleo que suponen alrededor del 11 % de la producción nacional, que ronda los 480.000 barriles al día.
El plebiscito se votará el próximo 20 de agosto en coincidencia de las elecciones legales, después de una batalla legal de diez años para su realización, librada por Yasunidos contra los órganos electorales tras reunir 757.000 firmas.
Si bien hasta ahora en el Bloque 43-ITT no se ha reportado ningún derrame de petróleo a la naturaleza, la intención de los ambientalistas es cesar la operación para evitar cualquier mayor impacto en el sensible entorno natural, que alberga más de 2.000 especies de árboles y arbustos, 204 de mamíferos, 610 de aves, 121 de reptiles, 150 de anfibios y más de 250 de peces.
También promovieron el plebiscito para proteger a los tagaeri, taromenane y dugakaeri, clanes indígenas en aislamiento voluntario, cuya zona intangible limita con el Bloque 43-ITT, en concreto con Ishpingo, el campo de mayores reservas.
La consulta solo se ciñe al Bloque 43-ITT, que entró en operaciones en 2016 a cargo de la estatal Petroecuador, y no vincula a otros yacimientos vecinos que operan dentro del Yasuní desde los años 80, como los bloques 16, 31 y 67.