Buenos Aires, 31 oct (EFE).- El ministro argentino de Economía, Sergio Massa, arremetió este martes contra las compañías petroleras por la aparición «de golpe» del combustible tras varias jornadas con falta de abastecimiento en las estaciones de servicio.
«Lo que sí quiero decir es que, sin que se haya tomado ninguna decisión todavía, cómo de golpe apareció el combustible», dijo el también candidato oficialista a la Presidencia argentina en declaraciones a la prensa a su salida de la Unión Industrial Argentina (UIA), donde mantuvo un encuentro con representantes del mundo fabril.
Massa mostró su extrañeza con la llegada repentina del combustible a las estaciones del área metropolitana de Buenos Aires (AMBA), que incluye la ciudad de Buenos Aires y 40 localidades del conurbano bonaerense, que permite afirmar que la situación está empezando a normalizarse.
A la medianoche de este martes (03.00 GMT) se cumple el plazo dado por el Ejecutivo argentino para la normalización del abastecimiento de combustible en el país, al tiempo que concluye el período de mantenimiento de precios, congelados desde agosto pasado, tras la celebración de las elecciones primarias.
«Lo quiero decir a los argentinos es que, por más que (las compañías) intenten forzar una subida del 40 %, no lo voy a permitir», dijo Massa, quien confirmó que se reunirá con las empresas a lo largo de la tarde y que esta noche hará «una evaluación».
El titular del Palacio de Hacienda expresó que, más allá de la alegría que provocan las exportaciones de las compañías petroleras y de la cantidad de puestos de trabajo generados en la explotación de la formación de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, «no pueden llevarse puesto el bolsillo de los argentinos».
A diferencia de las imágenes registradas durante todo el fin de semana, la normalidad en las estaciones de servicio se ha ido generalizando y apenas se ven filas de automóviles esperando.
Las principales empresas operadoras de refinerías en Argentina presentaron este lunes al Gobierno un plan de acción para normalizar la provisión de combustibles en el mercado doméstico.
El plan fue presentado en una reunión con la secretaria de Energía argentina, Flavia Royon, por YPF, controlada por el Estado argentino, la estadounidense Axion Energy, la suiza Trafigura y Raizén -asociación entre Shell y Grupo Cosan-, todas con refinerías bajo su control.
En un comunicado conjunto, estas cuatro petroleras señalaron que su plan de acción busca reforzar el «abastecimiento pleno» en la red de estaciones de servicio y «recuperar los niveles de stock operativos de toda la cadena hasta volver a la normalidad».
El ministro de Economía había acusado a empresas prodyctoras de petróleo de haber retenido crudo sin enviarlo a las refinerías para privilegiar su exportación en detrimento del abastecimiento doméstico.