Quito, 26 nov (EFE).- El Foro Global de Ciudades Seguras congregará del 28 al 30 de noviembre, en Quito, a expertos de más de treinta países y a alcaldes de diversos continentes con el objetivo de intercambiar conocimientos y experiencias enfocadas en hacer seguros los espacios públicos para mujeres y niñas.
Bajo el lema ‘Prospectiva estratégica y desafíos en el horizonte’, esta reunión bienal que organizan ONU Mujeres y el Municipio de Quito abordará diversas iniciativas y protocolos encaminados a eliminar la violencia contra las mujeres y promover el empoderamiento de ellas y la igualdad de género desde la planificación e infraestructura de los lugares públicos.
Entre los participantes habrá especialistas de más de 30 países y en programas desarrollados en el marco de la iniciativa programática Insignia de ONU Mujeres ‘Ciudades Seguras y Espacios Públicos Seguros para Mujeres y Niñas’.
Esta iniciativa fue puesta en marcha en 2010 por ONU Mujeres para prevenir y responder a la violencia sexual contra las mujeres y niñas en los espacios públicos y está ejecutada con el apoyo financiero de la Agencia Española de Cooperación para el Desarrollo (AECID) y otros donantes.
Para la reunión en Quito está confirmada la participación de alcaldes de países como Bolivia, Moldavia, Níger y Tanzania, además de otras autoridades de ciudades ecuatorianas como Portoviejo, Otavalo y Manta, de quienes se espera que hagan compromisos para mejorar la seguridad de mujeres y niñas en los entornos públicos de sus jurisdicciones.
El foro tendrá un declaración orientada a reafirmar compromisos como destinar recursos y aquellas acciones que están en competencia de las autoridades municipales como procesar denuncias y garantizar acceso a justicia, así como fomentar la sensibilización con campañas de comunicación.
Seguridad también en sector rural
La representante de ONU Mujeres en Ecuador, Ana Elena Badilla, explicó a EFE que el proyecto, que tiene doce años ya, se ha centrado en las ciudades, pero ahora quiere ampliar también la visión a los espacios públicos rurales.
«También ahí las mujeres transitan el espacio público y debemos garantizarle ahí de igual manera la seguridad. Normalmente se trata de comunidades geográficamente dispersas que tienen que caminar largas distancias para ir desde su casa al centro poblado, o para ir al médico. Transitan un largo camino en solitario.
«Ese es otro desafío porque habrá que verlo con otra mirada, habrá que pensar en qué soluciones podemos adoptar», añadió.
Badilla comentó que con «pequeñas acciones» como cambiar la orientación de las farolas para que iluminen las aceras y no la calzada, o poner los pasos de peatones al nivel de la acera para que los vehículos reduzcan la velocidad, se puede cambiar paulatinamente la mentalidad de la gente.
Vivir ciudad desde mirada de mujer
Por su parte, la secretaria de Inclusión Social del Municipio de Quito, María Belén Proaño, remarcó que «la experiencia de las mujeres en la ciudad es completamente diferente (a la de los hombres)».
«Nosotras tomamos decisiones diferentes, desde hasta qué hora puedo salir, por dónde puedo caminar, o en qué entornos me siento segura», indicó Proaño.
«(Ellas) tienen menos acceso a recursos materiales, y necesitan usar el transporte opúblico, y es justamente ahí donde más inseguras se sienten porque no tienen medios para acceder a otros medios de transporte», agregó.
El informe de Violencia Sexual en el Sistema Metropolitano de Transporte y Metrobús 2023 del Municipio de Quito reveló que cerca del 60 % de mujeres fueron víctimas de acoso y/o abuso sexual en el transporte municipal y que nueve de cada diez víctimas no denunciaron el hecho «por la falta de confianza en el sistema de justicia».
‘Cero acoso’ y senderos seguros
Para ese «problema grandísimo» de muestran las cifras, las autoridades locales de Quito presentarán en el Foro Global de Ciudades Seguras las iniciativas que pondrán en marcha para reducir esas cifras, sobre todo la campaña ‘Cero acoso’ ahora que en pocos días la capital ecuatoriana sumará el Metro como otra alternativa más de transporte.
«De las experiencias previas que hemos revisado, el hecho de que exista una campaña, un protocolo y que se informe, de alguna manera previene que los agresores cometan estos delitos porque sienten que va a tener consecuencias», dijo Proaño.
«Los agresores se han sentido de alguna manera protegidos con el hecho de que las mujeres no tienen acceso a hacer la denuncia o a que la ciudadanía no responde cuando ve un acto de este tipo», reiteró.
Asimismo, también el Municipio de Quito presentará su propuesta de ‘Senderos Seguros’, rutas transitadas en las que se buscará mejorar la seguridad en especial para mujeres, con una perspectiva también de «urbanismo feminista».
