Río de Janeiro, 9 sep (EFE).- El Gobierno de Brasil, uno de los mayores productores y exportadores mundiales de arroz, anunció este miércoles que redujo temporalmente a cero el arancel sobre la importación del grano con el fin de hacer frente a la fuerte subida del precio del alimento, que viene presionando la inflación.
La eliminación del arancel sobre el arroz inicialmente hasta el 31 de diciembre próximo fue aprobada hoy por la Cámara de Comercio Exterior (Camex), un consejo ministerial en el que tienen voz y voto carteras como la de Economía, Agricultura y Relaciones Exteriores, tras la petición del propio Gobierno.
La exención de impuesto de importación incidirá sobre una cuota de 400.000 toneladas de arroz y busca obligar a los productores a reducir los precios en el mercado doméstico para que puedan competir con el valor del grano importado.
Los precios de los alimentos básicos se han disparado en Brasil presionados por el fuerte aumento de la demanda en el mercado externo y la escalada del dólar, que le garantiza a los productores mayores ganancias con las exportaciones de granos.
El precio del arroz -un producto básico en la dieta de los brasileños- ha aumentado un 20 % en lo que va de año en momentos en los que el país enfrenta una grave crisis económica y social por la pandemia del nuevo coronavirus.
El aumento del precio de los alimentos es responsable por el 80 % de la inflación acumulada este año en Brasil, que llegó al 0,70 %, de acuerdo con los datos divulgados este miércoles por el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Pese a que el Gobierno del presidente Jair Bolsonaro impulsa una política económica de tinte liberal e insiste en no intervenir en el mercado, el propio líder ultraderechista manifestó su preocupación por la subida del precio del arroz y le pidió a los comerciantes que asuman una postura «nacionalista» y reduzcan su margen de ganancia.
Además, el Ministerio de Justicia notificó a los representantes de los supermercados y de los productores de los alimentos para que, en un plazo de cinco días, ofrezcan una explicación sobre el inusitado aumento del precio de los alimentos de la canasta básica.
Además de la mayor demanda externa y de la ventaja de los productores con la colocación de sus productos en el exterior, para la subida del arroz también contribuyó la retracción de la oferta del grano por parte de los cultivadores, ya que, pese a que estar en plena cosecha, con un 58 % del área recolectada, la actual producción es menor a la del año pasado.
El Gobierno brasileño ha descartado un posible desabastecimiento en el mercado interno de arroz y confía en la próxima súper cosecha, cuando está prevista una producción de 12 millones de toneladas, un incremento del 7,2 % respecto a la actual.
De acuerdo con el Ministerio de Agricultura, la próxima cosecha, que comenzará a ser comercializada en marzo de 2021, producirá un alivio en el precio del arroz, un alimento del que cada brasileño consume una media de 34 kilos por año.
