La Paz, 30 oct (EFE).- El proyecto de Presupuesto del Estado elaborado por el Gobierno interino de Bolivia para 2021 prevé una inflación del 3,9 %, más del doble respecto al 1,7 estimado al finalizar 2020.
El documento fue presentando este viernes al Parlamento del país, que está próximo a iniciar el nuevo periodo hasta 2025 con los legisladores salidos de las recientes elecciones en Bolivia.
La inflación acumulada a septiembre de 2020 es del 0,4 % y la prevista al cierre del año del 1,7 %, con lo que para 2021 duplicaría la del presente ejercicio y habría que remontarse a 2016, cuando alcanzó el 4 %, para llegar a un índice similar.
Este indicador fue del 2,7 % en 2017 y del 1,5 en 2018, de acuerdo al Banco Central de Bolivia.
El Ejecutivo transitorio de Jeanine Áñez ha elaborado un presupuesto estatal de unos 41.209 millones de dólares, a pocos días de que el próximo 8 de noviembre tome posesión Luis Arce como nuevo presidente del país tras ganar las elecciones del pasado 18 de octubre al frente del Movimiento Al Socialismo (MAS).
El proyecto prevé destinar el 11 % del gasto a educación y el 10 % a salud, algo en este último caso que ya se había anunciado tras las carencias que evidenció el sistema de salud boliviano durante el pico de la pandemia de la covid-19 en el país.
Las cuentas para 2021 estiman algo más de 500 millones de dólares en ingresos por venta de hidrocarburos, principalmente gas natural a Brasil y a Argentina, tomando como referencia un precio del petróleo, que sirve para calcular el del gas, de 37,21 dólares a precio intermedio de Texas (WTI).
El ministro interino de Economía de Bolivia, Branko Marinkovic, había adelantado en la víspera que el Presupuesto prevé para 2021 que la economía boliviana crezca el 4,2 %, tras la caída del 6,2 estimada en el presente año por la pandemia de la covid-19.
El nuevo Ejecutivo de Bolivia lo presidirá Luis Arce, quien fue ministro de Economía en doce los casi catorce años en el poder de Evo Morales.
La recesión en la economía boliviana deja hasta mitad de año un desempleo de casi el 12 %, cuando al término de 2019 fue del 4,8 %.