La Paz, 21 ene (EFE).- Activistas bolivianos reclamaron este jueves con una movilización en La Paz la devolución del cien por ciento de sus aportes a los fondos de pensiones y no solo una parte como lo plantea el Gobierno de Luis Arce.
Decenas de manifestantes llegaron hasta la plaza Murillo, sede del Gobierno y el Legislativo bolivianos, para reclamar que se les permita retirar la totalidad de sus aportes de jubilación.
«Son nuestros ahorros», «Devolución voluntaria de aportes a las AFP (administradoras de fondos de pensiones)», «Necesitamos la devolución de nuestros aportes al 100 %», rezaban algunas pancartas que llevaban los activistas, que integran el Movimiento de Emergencia Nacional por la Seguridad Social.
Estos sectores ya habían reclamado el año pasado el retiro anticipado del dinero de jubilación con diversas protestas callejeras.
El presidente boliviano, Luis Arce, anunció hace dos días que envió al Legislativo un proyecto de ley para la devolución de una parte del dinero de pensiones para «mitigar» los efectos de la pandemia de la covid-19 en la economía, una promesa que hizo en septiembre pasado durante la campaña electoral de los recientes comicios generales.
El proyecto plantea la devolución de hasta un 15 % de los aportes para quienes acumularon el máximo equivalente a unos 14.367 dólares y el retiro de la totalidad ahorrada si el monto es inferior a unos 1.436 dólares, según han difundido medios locales.
El retiro del 100 % de los aportes se permitirá solamente a las personas mayores de 50 años.
Quienes decidan retirar sus ahorros de jubilación serán excluidos de la «fracción solidaria», un beneficio establecido en las normas vigentes que permite incrementar el monto de la pensión de los asegurados.
No podrán solicitar la devolución quienes trabajen en el Estado o el ámbito privado, quienes ya tienen o están tramitando su jubilación, o quienes hayan aportado como dependientes del sector público a partir de diciembre de 2019.
La devolución del dinero de las pensiones no es nueva en Suramérica, ya que por ejemplo Chile aprobó un retiro de hasta el 10 % de los aportes en julio pasado y un segundo retiro en diciembre.
La pandemia incidió negativamente en la economía boliviana, que llegó a caer a un 11,1 % hasta el segundo trimestre de 2020 y las autoridades nacionales han previsto que la contracción anual alcanzará un 8,4 % en la gestión pasada.
El Gobierno de Arce, que lleva poco más de dos meses de gestión, ha estado enfocado en aplicar diversas medidas para reactivar la economía nacional.
El proyecto ha sido criticado por opositores como el empresario Samuel Doria Medina, quien consideró que es una medida irresponsable que debilitará el sistema de pensiones.