Buenos Aires, 28 ene (EFE).- La calificadora de riesgo Moody’s dijo este jueves en un informe que la resistencia de los bancos en Argentina será puesta a prueba este año ante las «desafiantes condiciones operativas» en el país suramericano.
De acuerdo a la agencia de calificación, el desempeño financiero de los bancos argentinos mostró ser relativamente «resistente» en 2020, con niveles de capital respaldados por una rentabilidad adecuada, un incremento en la financiación en moneda local y los amplios colchones de liquidez que mantienen las entidades financieras.
«Sin embargo, los desafíos siguen siendo significativos, ya que las métricas de calidad de los activos aún no reflejan el deterioro total derivado de la pandemia», advirtió Moody’s en su informe.
También persiste la presión que ejercen los menores márgenes de interés y los desequilibrios macroeconómicos en la rentabilidad de las entidades.
En este sentido, observó que el alcance total del deterioro de la calidad de los activos de los bancos sigue siendo «incierto», pero las reservas creadas podrían mitigar las pérdidas potenciales.
Sin embargo, apuntó la calificadora, es posible que en 2021 se requieran reservas adicionales conforme se hagan evidentes los incumplimientos de pago en los préstamos otorgados por los bancos y la pérdida correspondiente.
Por otra parte, el informe señala que la mayor regulación sobre las tasas de interés genera riesgos para la rentabilidad de los bancos.
Moody’s observó que los márgenes ya bajaron y se espera que experimenten mayor presión por los límites establecidos para las tasas de depósito y de otorgamiento de créditos.
Con todo, el informe resalta que el volumen de créditos comenzó a recuperarse en 2020, tendencia que podría continuar este año conforme comience a crecer la economía argentina, tras tres años de severa recesión.
Según Moody’s, los actuales niveles de capital, que se encuentran apoyados en las utilidades, generan una «capacidad adecuada» para absorber pérdidas en caso que se presente un mayor deterioro en las condiciones económicas del país suramericano.
Por otra parte, el informe señala que la preocupación por las reservas en moneda extranjera de Argentina continua afectando la confianza de los depósitos en divisa extranjera, aunque afirma que los bancos tienen suficientes colchones de liquidez para soportar la presión.