Ciudad de México, 10 mar (EFE).- Tras más de un año de convivencia con la covid-19, la Asociación de Bancos de México (ABM) afronta su convención anual con «solidez» en el sector y con los principales retos de «acabar con la pandemia», aliviar el impacto económico en los agentes más afectados y transitar a la digitalización, según su presidente saliente, Luis Niño de Rivera.
«Para el gremio y para el país (los retos) son los mismos. No nos podemos extraer. Primero, acabar con la pandemia desde el punto de vista de inocuidad, de salir y poder retomar la actividad económica», indicó Niño de Rivera en una entrevista con Efe la víspera de la Convención Bancaria que reúne a los banqueros mexicanos el jueves y viernes de esta semana.
El presidente del Consejo de Administración de Banco Azteca aceptó que para que eso ocurra el plan de vacunación, «hasta ahora muy lento», tendrá que acelerar si quiere llegar a los 126 millones de habitantes del país, 3 millones de los cuales han recibido ya al menos una dosis.
Paralelamente, el banquero, pese a que no espera ayuda gubernamental, llamó a urdir un «plan público y privado para que la economía se levante», en particular los sectores más afectados como «el turismo, los restaurantes, los hoteles y la industria de la aviación».
«Tenemos que trabajar en los lugares donde está el mayor daño. En particular, personas físicas con actividad empresarial y micro, pequeñas y medianas empresas. Ahí hay que poner mucho énfasis», añadió.
SITUACIÓN DE LOS CRÉDITOS
Luis Niño de Rivera subrayó la «muy sólida» posición de la banca tras destacar los pagos diferidos al principio de la contingencia a los que se sumaron 8,6 millones de personas, es decir, «el 22 % de la cartera de la banca al sector privado», y las reestructuraciones de deuda posteriores.
De los clientes que se acogieron a los retrasos en los pagos, 7,5 millones ya «retomaron su plan original», pese a lo cual la situación de la banca sigue siendo buena y la cartera vencida «está un poco abajo del 2,6 %», indicó el presidente saliente de la ABM.
«Los acreditados han actuado responsablemente y los bancos estamos preparados para hacer frente a lo que viene», aseveró.
Niño de Rivera describió que la demanda de crédito al consumo está contraída en un 7,7 % porque «las personas no quieren más deuda» pese a que la banca tenga dinero disponible».
Sin embargo, la demanda de crédito hipotecario «está creciendo por arriba del 9 % consistentemente de marzo para acá» debido a las tasas de interés «a niveles históricamente bajos» y porque las personas «ven a 15 o 20 años de distancia un panorama atractivo y tienen confianza de que van a salir de esta situación».
MEJORES EXPECTATIVAS
«El crédito a las empresas, sobre todo a las grandes, ha empezado a darse en enero. Y eso nos indica que puede haber una percepción de que la economía puede ir por mejor camino», sostuvo.
Además, recordó las revisiones al alza de la pasada semana en los pronósticos del producto interno bruto (PIB) estadounidense y también del mexicano, actualizado a un crecimiento del 4,8 % en 2021 por el Banco de México.
En esa línea, el presidente de la AMB se mostró confiado en que las remesas van a seguir consiguiendo récords, sobre todo, por los estímulos económicos que los migrantes están recibiendo en Estados Unidos.
«Están implementando un nuevo paquete de apoyos y estímulos, y eso nos da garantía que las remesas van a seguir con una prueba ya fehaciente, que es el mes de enero», apuntó, en referencia al récord de 3.297,88 millones de dólares recibidos en el primer mes de 2021.
REGULACIONES POLÉMICAS
La voluntad de facilitar el ingreso de las remesas al sistema bancario llevó al Congreso a debatir una nueva Ley del Banco de México que obligaba al regulador a aceptar dólares en efectivo de procedencia desconocida, un polémico proyecto que sigue en la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados.
«Lo importante es atender bien a los migrantes. ¿Cuál es el tema de fondo para ellos? Son dos: accesibilidad al mercado cambiario en puntos geográficos en los que les puede ser útil y sobre todo el tipo de cambio que reciben», manifestó Niño de Rivera.
La ABM se comprometió con el Gobierno a facilitar esos dos aspectos con cuentas remotas y a ofrecerles el tipo de cambio habitual en cada banco.
Además, los bancos mexicanos se verán afectados por la nueva Ley de la Industria Eléctrica, que favorece el despacho de las energías de la pública Comisión Federal de Electricidad (CFE) por encima de proyectos privados de energías renovables.
«La banca nacional y extranjera, igual que fondos de inversión mexicanos e internacionales, más las afores (Administradoras de Fondos para el Retiro) tenemos dinero prestado e invertido en el sector eléctrico. Va a tener consecuencias seguramente. No tenemos idea (de la magnitud), porque apenas está empezando esto», reconoció el banquero.
Luis Niño de Rivera recordó, sin embargo, que «hay indicios ya bastante claros de que la ley se va a judicializar» y que eso «tomará tiempo».