Santiago de Chile, 19 mar (EFE).- Un 78 % de los chilenos señala que necesita ahora el dinero de un tercer retiro de los fondos de pensiones, en un escenario donde la recuperación económica se desaceleró en medio de una segunda ola de la pandemia por la covid-19, que a la fecha ha causado la muerte de más de 22.000 personas en el país, según una encuesta de Ipsos conocida este viernes.
La consultora internacional Ipsos estudió la percepción de la ciudadanía chilena en torno a un eventual tercer retiro de los fondos de pensiones, medida que fue adoptada de manera inédita durante 2020 para enfrentar la profunda crisis económica derivada de las medidas de confinamiento.
A la fecha, las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), que aparecen como una de las instituciones más criticadas en Chile por sus ganancias multimillonarias contrastadas con las bajas pensiones entregadas, han transferido más de 32.000 millones de dólares a cuentas bancarias de ciudadanos, cifra cercana al 12 % del producto interno bruto (PIB) del país.
Sin embargo, de acuerdo con los resultados de la encuesta, un 21 % de las personas consultadas declaró no haber tenido fondos para retirar, mientras el país lleva nueve meses presentando dos dígitos en sus cifras de desempleo.
Durante 2020, el PIB de Chile sufrió su mayor contracción desde 1982, cayendo un 14 % en el segundo trimestre, cuando el país era azotado por la primera ola de la covid-19.
La iniciativa de un tercer retiro del 10 % de los fondos de pensiones, presentada en esta oportunidad por un parlamentario oficialista, fue recibida con críticas por parte de la recién asumida presidenta del Senado, la militante demócrata cristiana Yasna Provoste.
«No podemos seguir viviendo las crisis sociales y sanitarias donde la única solución sea seguir usando los ahorros individuales, ya sea de la cuenta previsional o de la cuenta de censantía, como hoy se propone», declaró la segunda máxima autoridad del país a la prensa local.
Y es que pese a las señales de optimismo recogidas en el mercado de inversiones, procuradas en parte por la exitosa campaña de vacunación que a la fecha ha alcanzado a más de 5,4 millones de personas, la recuperación no llega a todos los bolsillos y las opciones se agotan.
En esa línea, Provoste, consultada por los desafíos del año legislativo, enfatizó en la necesidad de una «renta básica universal que asegura dignidad a las personas y certidumbre a las familias».
De aprobarse un tercer retiro, según el estudio de opinión pública, un 69 % declaró que lo solicitaría a la AFP correspondiente, mientras un 76 % aseguró que prefiere sacar su dinero ahora antes de que se vaya a un sistema de reparto.
