Managua, 28 abr (EFE).- El sector ganadero y lácteo de Nicaragua, que aporta el 25 % del PIB y genera 650.000 empleos entre formales e informales en un país de 6,5 millones de habitantes, acordaron este miércoles impulsar una agenda de sostenibilidad ambiental, con el fin de producir más carne con mayor calidad e inocuidad.
El director ejecutivo de la Cámara Nicaragüense de Plantas Exportadoras de Carne Bovina (Canicarne), Juan Velásquez, dijo a Efe que la idea es promover una producción ganadera ambientalmente sostenible para la conservación de los recursos naturales y la sostenibilidad económica y social.
«Una ganadería que no sea ambientalmente sostenible no es económica ni socialmente sostenible», sostuvo el ejecutivo.
Con esa agenda el sector ganadero y lácteo se comprometen, entre otros, a preservar las áreas protegidas, cuidar el medioambiente, y respetar los derechos humanos de las comunidades indígenas, explicó.
«Nos hemos unido como sector para comprometernos a la mejora continua de nuestros sistemas de producción, la protección del medioambiente y la mejora de la calidad de vida de nuestros productores», apuntó Velásquez.
LOS PUNTOS CLAVES
El dirigente gremial subrayó que un punto clave de la agenda es promover estrategias de producción ganadera sostenible que sean voluntarias, orientadas al mercado, basadas en la ciencia, de acuerdo con la situación y la región específica, las cuales deberán ser diseñadas e implementadas de manera local.
Otro punto es proteger y respetar los derechos humanos y reconocer los roles que juegan los participantes del sector en sus comunidades, cultura y cuido del medioambiente, especialmente las comunidades indígenas y las áreas protegidas, indicó.
El sector ganadero y lácteo también se comprometen a promover la transición de una ganadería extensiva a intensiva, y fomentar el manejo de los recursos integralmente, incluyendo clima, suelo, topografía, vegetación, fuentes de agua y comunidades animales, de acuerdo con el convenio.
Además, continuó Velásquez, esa agenda ambiental promoverá la investigación privada y pública sobre tecnologías que ayuden a mejorar la producción ambientalmente sostenible y la creación de un grupo de trabajo que analice y dé recomendaciones sobre las acciones que el sector ganadero debe de tomar para enfrentar los efectos del cambio climático.
Para ello, la iniciativa contempla el desarrollo de marcos de trabajo que involucren el compromiso de todos los integrantes del sector, así como promover en la industria la utilización de energía renovable y manejo sostenible de residuos, anotó.
LOS PRINCIPALES MERCADOS
La agenda de sostenibilidad ambiental fue suscrita por Canicarne, la Cámara Nicaragüense del Sector Lácteo de Nicaragua (Canislac), la Federación de Ganaderos de Nicaragua (Faganic), la Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (Upanic), la Comisión Ganadera de Nicaragua (Conagan), y la Asociación de Criadores de Ganado Brahman de Nicaragua (Acbn).
El lanzamiento de esa agenda fue anunciado en el marco de la Feria Nacional Agropecuaria (Fenagro), que se realiza desde hoy hasta el tres de mayo próximo, en Managua.
Los principales mercados de la carne bovina de Nicaragua son Estados Unidos, El Salvador, Puerto Rico, Taiwán, México, Guatemala, Costa Rica, Japón, Tailandia, Hong Kong y España, según el sector.
En 2020, Nicaragua exportó 132,99 millones de kilogramos de carne bovina por un valor de 586,1 millones de dólares, más 166,4 millones de dólares en queso y lácteos, para totalizar 752,5 millones de dólares en divisas, según cifras del sector.
En Nicaragua, según cifras de la Conagan, el hato ganadero es de 6,2 millones de animales, es decir casi una cabeza de ganado por habitante, las cuales están distribuidas en 146.000 fincas, de ellas entre un 85 % a un 90 % son administradas por pequeños y medianos productores, y la mayoría están certificadas con la trazabilidad bovina, lo que permite identificar el origen y las cualidades del ganado.