Lima, 31 ago (EFE).- El presupuesto público de Perú para el 2022 se financiará con recursos ordinarios y colocará la prioridad en salud, educación y agricultura, sectores que requieren cambios urgentes según el Gobierno del mandatario Pedro Castillo.
El ministro de Economía, Pedro Francke, explicó en rueda de prensa que la propuesta de «cambios con responsabilidad» defendida por Castillo busca «ponerle prioridad a educación, salud y agricultura», sectores golpeados por la pandemia del covid-19, pero también por años de abandono del Estado.
En ese sentido, el proyecto de presupuesto enviado por el Ejecutivo al Congreso, para su debate y aprobación, tiene un incremento de 5,8 % para salud, de 7,9 % para educación y de 10,4 % para agricultura que será financiado principalmente con más de 118.000 millones de soles (28.000 millones de dólares) de recursos ordinarios.
De los más de 197.000 millones de soles (48.000 millones de dólares) del presupuesto público para el 2022, el 61 % corresponde a montos que se descentralizan a los gobiernos regionales y locales en el país.
SECTORES MÁS CRÍTICOS
Con centros de salud que sólo disponían de 100 camas UCI a inicios de la pandemia y escuelas cerradas desde el 2019 por temor a los contagios por el covid-19, el sector rural tiene también «una enorme brecha de desigualdad» para asegurar su conectividad, señaló Francke.
A pesar de que Perú ha recuperado hasta julio último los niveles de Producto Interno Bruto (PIB) pre-pandemia y que ha alcanzado un ritmo de vacunación que se incrementa mes a mes, Francke reconoció que se vive «un contexto bastante incierto».
Las proyecciones de crecimiento del PIB para el 2021 se mantienen en 10,5 % y el promedio para 2022 es de 4,8 %, pero que irá «ralentizándose en los próximos años», aunque siempre por encima del promedio en Latinoamérica, indicó el ministro.
Los proyectos inversión privada, especialmente de minería e infraestructura, se irán favoreciendo con el ingreso de operaciones de varias unidades, y el gobierno impulsará la reactivación del turismo y restaurantes, parte de los servicios que representan el 37 % del PIB, agregó Francke.
La mejora de la recaudación tributaria en lo que va del año permitirá un incremento de 19,9 % de los ingresos del gobierno general, frente al gasto no financiero de 22,9 %.
REDUCIR LA DEUDA PÚBLICA
El ministro resaltó también que «una lógica de responsabilidad fiscal es mantener la deuda pública a un nivel limitado» y aseguró que se prevé un endeudamiento menor que el año pasado.
Perú registró un déficit fiscal de 8,9 % en 2020, que bajará a 4,7 % en 2021, en tanto que su deuda pública se encuentra en 35 % del PIB, tras un año pasado de fuerte endeudamiento para responder a la crisis económica por la pandemia.
Respecto a las reformas constitucionales que el presidente Castillo dijo que impulsará durante su gobierno (2021-2026), Francke aclaró que su despacho no tiene «ninguna propuesta al respecto» y que no está trabajando ningún tema de reforma en materia económica, además de subrayar que las reformas están basadas por el diálogo.
Sobre la permanencia del director del Banco Central de Reserva, Julio Velarde, el ministro recordó que «el presidente ha sido explícito en su propuesta que se quede en el cargo», y que, entre septiembre y octubre, el Ejecutivo nombrará a los funcionarios que integrarán el nuevo directorio.