San José, 16 jul. (EFE).- El desempleo en Costa Rica alcanzó el 20,1 % en los primeros meses de la pandemia de la COVID-19 en el país (marzo, abril y mayo), lo que representa un incremento de 8,8 puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo de 2019.
Los datos divulgados este jueves por el estatal Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) indican que la población desempleada llegó a 468.000 personas, 190.000 más de la que había en el mismo trimestre del año pasado.
«Los dos últimos meses (abril y mayo) reflejan el estado de afectación en los indicadores del mercado laboral por las medidas de confinamiento y restricción al movimiento tomadas en el país con el fin de contener la pandemia de la COVID-19», explicó el INEC.
Costa Rica registró el primer caso de la COVID-19 el 6 de marzo pasado y poco a poco fue tomando medidas restrictivas para actividades económicas y la movilidad de la gente, sin llegar a decretar una cuarentena generalizada.
Los datos oficiales indican que las mujeres presentan una mayor tasa de desempleo del 26 %, mientras que en los hombres es del 16,3 %.
El porcentaje de las personas ocupadas que trabajan menos de 40 horas por semana y desean trabajar más (subempleo) se situó en el 17,6 %, lo que supone un incremento de 8 puntos porcentuales en comparación con el mismo trimestre de 2019.
Durante la pandemia las autoridades del país establecieron una serie de acciones que buscaban preservar los puestos de trabajo, entre estas la posibilidad de las empresas para reducir jornadas laborales y de suspender contratos de manera temporal.
El director ejecutivo de la Cámara de Industrias, Carlos Montenegro, manifestó que el dato de desempleo revelado este jueves coincide con los cálculos que había hecho la cámara y expresó su preocupación de que la situación siga empeorando en los siguientes meses.
«Hemos reiterado que la salud física debe ir de la mano con la salud económica y ahora es cuando más le corresponde al Poder Ejecutivo y Asamblea Legislativa tomar acciones inmediatas para mejorar el clima de negocios y realizar las reformas necesarias para mejorar la competitividad y generar empleo», declaró.
Entre esas medidas aseguró que es indispensable reducir las tarifas eléctricas y de los combustibles.
A mediados de mayo Costa Rica comenzó una reapertura gradual de actividades económicas, pero con la llegada de una segunda ola de contagios entre junio y julio el Gobierno ha aplicado cierres en el área metropolitana que estarán vigentes hasta el próximo domingo.
El turismo es uno de los sectores más afectados pues desde marzo están cerradas las fronteras a los extranjeros. El Gobierno tiene previsto reabrir las fronteras aéreas al turismo el próximo 1 de agosto, aunque la fecha podría cambiar dependiendo del comportamiento de la pandemia.
Hasta el miércoles este país centroamericano de 5 millones de habitantes contabilizaba un total de 8.986 casos de COVID-19, 40 fallecidos, y registros superiores a los 400 casos diarios en los últimos días.