Acapulco (México), 24 mar (EFE).- La Convención Bancaria mexicana volvió este jueves tras dos años de pandemia a Acapulco, donde los banqueros y el presidente Andrés Manuel López Obrador presumieron de «estabilidad» en medio de sacudidas, como la guerra en Ucrania y la polémica por la autonomía del Banco de México (Banxico).
“Expreso mi optimismo por la favorable situación que prevalece en nuestro país, puedo afirmar que hay estabilidad económica y social, así como tranquilidad y gobernabilidad», declaró López Obrador en la inauguración de la Convención Bancaria 85.
LA POLÉMICA QUE MARCÓ AL EVENTO
El presidente participó en el evento tras un día marcado por la polémica que él creó al romper todo precedente en su rueda de prensa matutina, donde reveló antes que Banxico decidió la subida de 50 puntos base de la tasa de interés, hasta el 6,50 %, una facultad que es exclusiva del banco central autónomo.
Ante las críticas de analistas y opositores, que lo acusaron de vulnerar la autonomía del banco central y violar la confidencialidad que ordena la ley, el mandatario ofreció una disculpa a la gobernadora de Banxico, Victoria Rodríguez Ceja, y alegó haberse confundido.
«Pensé que ya se había hecho público y hoy en la mañana hablé del tema, pero quiero decirles que reafirmo mi compromiso de respetar la autonomía del Banco de México», justificó.
El líder de los banqueros, Daniel Becker, por la mañana aseveró «no ver ningún riesgo» para la independencia de Banxico, pero en la tarde pidió «certidumbre» ante el presidente, aunque sin referirse de forma directa al tema.
“Estimado presidente, ayúdenos a crear condiciones de confianza y certidumbre y a traducirlas en crecimiento económico. Esa es la fórmula del éxito. Trabajemos juntos en fortalecer las instituciones que son los pilares de esa actividad», solicitó el presidente de la ABM.
Tras el reclamo, López Obrador prometió que «no cambiarán las reglas en el manejo de la política bancaria», que «tampoco se establecerán nuevas regulaciones o controles y seguirá prevaleciendo un auténtico Estado de derecho».
LA SOMBRA DE LA GUERRA
La Convención Bancaria pretendía dejar atrás la crisis de la covid-19, que ha dejado en México más de 322.000 muertes, la quinta cifra más alta del mundo, además de una contracción histórica de 8,2 % del producto interno bruto (PIB) en 2020 con un repunte de 4,8 % en 2021.
Pero el representante de la ABM, que agrupa a la cúpula de más de 50 instituciones financieras, reconoció que la invasión de Rusia en Ucrania de hace casi un mes ha reducido las expectativas de crecimiento para México en 2022 a un rango de entre 2,4 % y 2,9 %.
Aun así, a pregunta de Efe, aseveró que la invasión rusa no ha tenido «ningún» impacto concreto en el sistema financiero mexicano, que muestra una «robustez» por tener en cartera casi 7 billones de pesos (casi 350.000 millones de dólares).
“Ninguno aún, lo único que estamos observado son incrementos de precios, pero hoy no hemos observado ningún impacto ni en la calidad de la cartera, ni en los fondeos, ni en la liquidez de los mercados”, sostuvo Becker.
La gobernadora del Banco de México, quien evadió los cuestionamientos de la prensa, advirtió que la guerra deja un «entorno más complejo» de inflación nacional, que está por encima del 7 % anual en sus niveles más altos en 20 años.
Sin embargo, hizo eco de los argumentos de la solidez del sector bancario mexicano.
«El apretamiento de las condiciones monetarias y financieras a nivel global constituye un riesgo para los mercados financieros nacionales, sin embargo, hasta ahora han mostrado un comportamiento ordenado, si bien con algunos episodios de volatilidad», afirmó Rodríguez Ceja.
AÑO DE RETOS Y OPORTUNIDADES
El secretario mexicano de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, reconoció que la economía afronta «otro año de retos» por las secuelas de la pandemia y la guerra en Ucrania, pero también hay oportunidades para México.
«El actual contexto internacional y la localización geográfica de México han posicionado a nuestro país como uno de los más atractivos para la inversión productiva, aunado esto al trabajo que ha realizado el Gobierno», aseguró.
El Gobierno de López Obrador, afirmó, invierte ahora más de 630.000 millones de pesos (casi 31.500 millones de dólares) en proyectos «para facilitar el comercio, la movilización de mercancías y la conectividad».
Y anunció un proyecto de 10.000 millones de pesos (casi 500 millones de dólares) para financiamiento de micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes).