Lima, 1 abr (EFE).- El Gobierno de Perú reclamó este viernes a los transportistas, que llevan cinco días en paro, que no bloqueen carreteras ni causen daños a las propiedades, luego de que un grupo de manifestantes se enfrentaran a las autoridades en el departamento de Junín, vecino de Lima.
«Los transportistas tienen derecho de huelga, pero no pueden afectar la propiedad ni bloquear carreteras porque estos actos constituyen delito. El Estado resguarda el orden por los mecanismos legales. Nuestro Gobierno está dispuesto a solucionar las demandas sociales con diálogo», escribió en Twitter el Consejo de Ministros.
Los gremios de transportistas de carga pesada comenzaron el lunes una huelga indefinida para protestar por el alza del combustible y urgir una mesa de diálogo con el Gobierno para negociar la reducción del costo del petróleo y derivados.
La protesta, que el martes llegó a bloquear 40 vías a nivel nacional, continuó este viernes a pesar de los acuerdos que anunció la víspera el primer ministro, Aníbal Torres.
En la localidad de Huancayo, capital de Junín, los manifestantes se enfrentaron este viernes a las unidades antidisturbios de la Policía durante cerca de una hora.
El paro había sido anunciado días atrás ante la subida de precios de los combustibles y exige eliminar la competencia desleal de los transportistas extranjeros y direccionar la reserva de carga para los gremios nacionales.
Además, urge la eliminación del impuesto selectivo al consumo de los combustibles y la revisión de los contratos de concesión de carreteras y peajes.
Con el afán de mitigar ese alza, el Ejecutivo oficializó el martes una serie de medidas técnicas, entre ellas la incorporación por tres meses de la Gasolina de 84 y 90 y el Gasohol de 84 al Fondo de Estabilización de los Precios de los Combustibles Derivados de Petróleo (FEPC).
En este fondo, lanzado en 2004 para evitar que la elevada volatilidad de los precios internacionales del petróleo se traslade a los consumidores peruanos, también se incluyó temporalmente al Diésel 2 y al Gas Licuado de Petróleo (GLP) a granel.
El Gobierno también anunció ayer la creación de una «comisión de diálogo» para atender las demandas de los transportistas de carga pesada, que hace cinco días comenzaron un paro indefinido en varias regiones del país en protesta por el alza del combustible.