Sao Paulo, 4 may (EFE).- La multinacional alemana Volkswagen suspenderá por 20 días su producción automotriz en la planta de Sao Bernardo do Campo, en el interior de Sao Paulo, debido a la falta de piezas en medio de la crisis global de escasez de semiconductores, informaron este miércoles fuentes sindicales.
Según el Sindicato de Metalúrgicos del ABC paulista, la planta, cuya producción asciende a cerca de 800 vehículos por día, paralizará sus actividades a partir del próximo lunes y la medida se extenderá hasta el 28 de mayo, afectando a unos 2.500 trabajadores.
La compañía ya había anunciado la víspera la suspensión temporal de los trabajos en otra fábrica, localizada en el estado del Paraná, en el sur de Brasil, igualmente por la escasez de piezas que impiden finalizar los montajes de los coches.
En un comunicado, el sindicato reconoció que la crisis de los semiconductores, amplificada por el conflicto en Ucrania, un importante proveedor de insumos para la industria, es un problema global, pero denunció la ausencia de políticas públicas para disminuir la dependencia de Brasil de piezas importadas.
«Esa crisis no afecta solo a Brasil, pero la falta de políticas públicas volcadas para la industria y de discusiones sobre desarrollo, pesquisa e innovación llevan a momentos como estos, en los que somos rehenes de la importación», destacó el director administrativo de la entidad, Wellington Messias Damasceno, citado en la nota.
Por su parte, el coordinador general del sindicato, José Roberto Nogueira da Silva, señaló que la paralización afectará a toda la cadena de producción automotriz en el país, ya que la situación se repite en otras fábricas brasileñas.
«Hay demanda de producción, pero la fábrica no consigue atender al consumidor final por esa escasez de piezas. Estamos en la expectativa de una retomada» en el plazo «más breve posible», resaltó.
En los últimos meses, la falta de materias primas por el desabastecimiento mundial ha obligado a la mayoría de los fabricantes brasileños de vehículos a reducir considerablemente sus actividades, por lo que las ventas de automotores nuevos ya acumula una caída del 21,35 % en lo que va de año en el país, según fuentes del sector.