La Habana, 3 sep (EFE).- El déficit energético previsto para el horario de mayor consumo en Cuba será del 26 % de la capacidad máxima de generación, informó este sábado la empresa estatal Unión Eléctrica (UNE).
Pese a disminuir en comparación con otros días de esta semana cuando el déficit superó el 50 % de la capacidad de generación, se prevén cortes en el suministro eléctrico durante el día.
Los largos y molestos apagones de los últimos días afectan desde hace meses a todas las provincias del país, incluida La Habana, a veces con hasta 12 horas consecutivas sin servicio eléctrico.
Según comunicó la UNE, la capacidad de generación en el horario pico ascenderá a 2.330 megavatios (MW), mientras que la demanda máxima será de 2.950 MW, por lo que el déficit calculado rondará los 620 MW.
La compañía estatal calcula además una afectación máxima de 690 MW en el horario de mayor consumo, y de 650 MW durante el día.
El servicio se afectó ayer viernes por déficit de capacidad durante las 24 horas de día, así como durante toda la madrugada de hoy, precisó el parte diario de la empresa distribuidora.
Los cortes eléctricos -debidos a fallos y roturas en las anticuadas plantas termoeléctricas, la falta de combustible y los mantenimientos programados- son cada vez más frecuentes en el país.
Según datos de la UNE cotejados por Efe, en 60 de los 62 días de julio y agosto se registraron cortes del suministro eléctrico en la isla caribeña.
El Gobierno cubano busca reducir los apagones para finales de año a través de reparaciones y nuevas inversiones.
Los apagones afectan todos los ámbitos de la economía y de forma notable la vida diaria de los cubanos, lo que está azuzando el descontento social en una país que atraviesa una severa crisis.
En los últimos días han ocurrido varias decenas de protestas como las Nuevitas (oriente), con dos noche consecutivas de manifestaciones.
Los apagones fueron el año pasado uno de los principales motivos tras las protestas contra el gobierno del 11 de julio, las mayores en décadas.
Cuba depende en gran medida del petróleo extranjero para producir energía (las termoeléctricas generan dos tercios de la electricidad) y su principal proveedor, Venezuela, ha disminuido notablemente sus envíos.