Sao Paulo, 26 sep (EFE).- El índice de confianza del consumidor brasileño avanzó en septiembre a 89 puntos, el mayor nivel desde enero de 2020, antes de la llegada de la pandemia al país, una mejoría que se debe en parte al optimismo generado por las elecciones, informó este lunes la Fundación Getulio Vargas (FGV).
La mejoría de este indicador se debió, principalmente, a las expectativas optimistas en relación a la situación económica para los próximos meses, que llegó a 100,2 puntos, el mayor valor desde diciembre de 2019, según un comunicado de la FGV.
La cercanía de las elecciones, que se celebran el próximo domingo, «tiene un efecto potenciador de las expectativas» de mejoría de la economía, afirmó una de las coordinadoras del sondeo, Viviane Bittencourt, en un comunicado.
Este es el cuarto mes seguido de mejoría en este indicador, que sirve de referencia para prever la tendencia del consumo interno, uno de los principales pilares de la economía brasileña.
El optimismo del consumidor «parece estar relacionado con la caída en las expectativas de inflación de los consumidores para los próximos 12 meses y un aumento del optimismo en relación al mercado de trabajo», según Bittencourt.
La intención de consumo mejora en todas las capas sociales, menos entre los más pobres, «lo que refleja las dificultades de esa clase», según el estudio.
No obstante, la FGV recomendó tomar con «cautela» los resultados del estudio, debido a los altos tipos de interés, del 13,75 %, y por la posibilidad de que se produzca una desaceleración en la actividad económica.
Brasil celebra elecciones presidenciales y legislativas el próximo domingo, unos comicios en el que el favorito es el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien en todas las encuestas saca una ventaja de cerca de 15 puntos porcentuales al actual gobernante, Jair Bolsonaro.
