Ciudad de México, 3 ene (EFE).- El principal reto de la nueva ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de México, Norma Pïña, será preservar la autonomía del máximo tribunal, consideraron este martes empresarios mexicanos.
Tras la elección de Piña como la primera mujer en presidir el Supremo mexicano, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) señaló que “tendrá como retos principales preservar la autonomía del tribunal, la sana división de poderes y el efectivo funcionamiento del sistema de pesos y contrapesos del país”.
“Sin duda, la ministra Norma Lucía Piña cuenta con la capacidad técnica, la experiencia y el perfil para poder liderar una institución clave para nuestro país”, subrayó la organización empresarial que representa a más de 36.000 empresas y contribuye con una tercera parte del producto interno bruto (PIB) mexicano.
La Coparmex señaló que como organización empresarial resulta “un factor clave” el que “exista certidumbre jurídica” en el país, ya que permite generar condiciones para atraer más inversiones, más empleos y bienestar para las familias mexicanas.
“Esta certeza y legalidad requieren que el máximo órgano jurisdiccional del país goce de independencia, libertad y de los perfiles idóneos para tal responsabilidad”, suscribió.
Sobre el proceso de elección, la Coparmex reconoció que se mantuvo la “institucionalidad”, “lo que genera un ánimo de confianza en el quehacer y autonomía del Máximo Tribunal Constitucional de México”.
“Reconocemos a los ministros de la SCJN, quienes alcanzaron, en un ejercicio democrático, un acuerdo que permitió a la ministra Piña convertirse en la primera mujer en presidir la Suprema Corte”, señaló.
Por su parte, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), organismo cúpula de toda la iniciativa privada mexicana, confió en la capacidad de la hoy ministra presidenta Piña para abonar al desarrollo y desempeño del poder judicial mexicano.
“Confiamos en su capacidad para abonar al desarrollo y buen desempeño del máximo tribunal constitucional del país”, señaló el CCE en Twitter.
La elección de la nueva presidenta de la Suprema Corte estuvo rodeada de la polémica que se desató días atrás en torno a la candidata Yasmín Esquivel, nominada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en 2019 en medio de controversia por ser esposa de un contratista cercano al Gobierno y ahora acusada de plagiar su tesis de licenciatura.
López Obrador aseveró en su rueda de prensa diaria de este martes que la elección de Piña refleja la autonomía de la Suprema Corte, al reconocer que tiene diferencias con la ministra presidenta y que ella «siempre ha votado en contra de las iniciativas» que ha defendido su Gobierno.