Bogotá, 19 ene (EFE).- Las aerolíneas colombianas Avianca y Viva Air deberán volver a solicitar formalmente su integración, después de que la Aeronáutica Civil de Colombia (Aerocivil) haya decidido estudiar bajo otra normatividad la petición de unirse, informó este jueves el organismo.
La decisión se tomó luego de que fuera encontrada una irregularidad en el trámite que se aplicó desde el día cero de la presentación de la solicitud ante la Aerocivil.
De acuerdo con la resolución del Ministerio de Transporte y la Aerocivil, se utilizaron los métodos del Código de Procedimiento Administrativo, pero las que se debían aplicar eran las normas del régimen de libre competencia de Colombia.
«La Resolución declara la existencia de una irregularidad sustancial en el trámite de la actuación administrativa en primera instancia, que obliga a la devolución del expediente a la Dirección de Transporte Aéreo y Asuntos Aerocomerciales para que rehaga la actuación administrativa», dijo el director de la Aerocivil, Sergio París, en una declaración a la prensa.
El ejecutivo explicó que la decisión se adoptó «con base en el derecho fundamental al debido proceso» y ya fue notificada «a los operadores Avianca, Viva Air y terceros interesados sobre la decisión adoptada en la Resolución 00079 del 18 de enero de 2023».
Un comunicado de la Aerocivil añade que el organismo «procederá con celeridad, y en los tiempos de ley, para emitir un concepto sobre la solicitud de integración de los operadores aéreos Avianca y Viva Air».
Avianca y Viva esperan integrarse bajo la causal de «empresa en crisis», para poder operar bajo un mismo holding regional, el Grupo Abra, que incluye también a la brasileña GOL.
EL PROCESO
Esta nueva decisión de negación contra el proceso de integración se dio a días de que se venciera el plazo final para que la Aerocivil decidiera si aprobaba o no la unión, bajo la apelación que Avianca y Viva habían radicado previamente.
En noviembre pasado Avianca y Viva Air apelaron la decisión de la Aerocivil de rechazar la integración de ambas compañías al considerar que esta puede generar una indebida restricción de la competencia.
Las aerolíneas sometieron, en agosto pasado, a control de la autoridad aeronáutica la operación de integración, pero el ente concluyó, después de un análisis de un equipo técnico y jurídico, que eso «representa riesgos para la competencia en el sector y el bienestar de los consumidores».
Entre los argumentos que dio la Aeronáutica están que «este grupo económico alcanzaría el 100 % de la participación en 16 rutas nacionales» y que, «en términos de libre competencia, significaría un retroceso y volver a niveles que no se veían en el país hace más de siete años».