Caracas, 12 ago (EFE).- Venezuela acumuló una inflación de 843,44 % en los primeros siete meses de 2020, luego de que el indicador cerrara en 55,05 % en julio pasado, informó este miércoles la Asamblea Nacional (Parlamento), que entrega estos datos en vista de la omisión informativa del Banco Central.
Según el reporte, los rubros de servicios generales y telecomunicaciones fueron los de mayor incremento entre junio y julio, con 483,5 % y 326,4 %, respectivamente.
«Hay un tarifazo en marcha», dijo a Efe el diputado opositor Ángel Alvarado, quien divulgó este jueves los datos. «La gente no solo consume alimentos, también consume servicios, que son de mala calidad porque nunca se ajustaron y ahora que se ajustaron son malos», añadió.
Los sectores de educación, con 56 %, y equipamiento del hogar, con 44,4 %, también registraron incrementos que Alvarado estimó considerables.
Los alimentos y las bebidas no alcohólicas, entretanto, subieron 10,9 %, pese a que el Parlamento registró un descenso en el consumo, producto de la caída general de la economía por la pandemia del nuevo coronavirus, que en Venezuela ya ha matado a 238 personas, según cifras oficiales.
Con estos datos, la inflación interanual -de julio de 2019 a julio de 2020-, se ubicó en 4.099 %.
Alvarado también dijo que Venezuela se mantiene en el escenario de hiperinflación en el que entró a finales de 2017, cuando la crisis que atraviesa el país se expresó con crudeza.
«Tendremos hiperinflación al memos hasta agosto de 2021, nos mantenemos en este proceso porque hacen falta 12 meses consecutivos con inflación por debajo de 50 % para salir», explicó.
El Parlamento solía estimar en solo 3 los meses necesarios con inflación por debajo de los 50 puntos para abandonar el escenario de hiperinflación, pero Alvarado no señaló hoy por qué hubo un cambio en la metodología del Legislativo para medir este escenario.
Venezuela atraviesa desde hace más de un lustro por la peor crisis de su historia moderna, con hiperinflación y escasez puntual de algunos productos, fenómenos que ocasionaron el éxodo de más de 4 millones de ciudadanos, según datos de la ONU.
El Gobierno de Nicolás Maduro achaca los problemas del país a una presunta «guerra económica», pero la oposición venezolana lo acusa de la crisis, al tiempo que le pide renunciar al poder, en el que está desde 2013.
