Ciudad de México, 15 feb (EFE).- La aerolínea mexicana Aeromar informó este miércoles del cese definitivo de sus operaciones por problemas financieros tras 35 años de volar en México, Estados Unidos y Cuba, lo que implica el cierre de la segunda empresa aérea en el país en menos de tres años.
“Esta decisión responde a una serie de problemas financieros por los que atravesaba la aerolínea, así como la dificultad de cerrar acuerdos con condiciones viables que permitieran asegurar las operaciones de Aeromar a largo plazo”, detalló la empresa en un comunicado.
La aerolínea, que inició operaciones en 1987 con 21 destinos nacionales y tres internacionales, aseguró que “el equipo de la compañía realizó profundos ajustes financieros para mejorar su situación”.
Sin embargo, explicó, “en un entorno adverso, agravado durante la pandemia de la covid-19, las medidas tomadas no fueron suficientes para estabilizar la situación de la empresa”.
Aeromar también refirió que trabajó desde hace cuatro años con autoridades mexicanas para solucionar su situación financiera, y con las que aprobó, en conjunto, los pagos a personal, proveedores y autoridades correspondientes, tras una revisión de la información financiera auditada de la compañía.
Con su salida, Aeromar dejará de sobrevolar los cielos desde y hacia la Ciudad de México, su sede, así como hacía 19 destinos en México, uno en Cuba y dos más en los Estados Unidos.
La quiebra de Aeromar sacudió a la industria aérea en México, donde apenas en 2021 la aerolínea Interjet dejó de operar y buscó un concurso mercantil para salvarse.
Aeromar enfrenta adeudos por más de 7.000 millones de pesos (unos 368,4 millones de dólares), entre diversos acreedores y servicios, entre los que destacan más de 522 millones de pesos (27,5 millones de dólares) al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) por el alquiler de sus instalaciones.
Además, de pagos pendientes por más 74 millones de pesos (3,9 millones de dólares) con Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) por el suministro de combustible y servicios aeroportuarios, más de 105 millones de pesos (5,5 millones de dólares) a trabajadores, incluidos pilotos.
También acumula adeudos a los Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Servicio de Administración Tributaria (SAT) y el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).
LLAMAN A HUELGA
La afectación también se trasladó a su plantilla laboral, conformada por 578 trabajadores, entre pilotos, sobrecargos y personal de atención en tierra y quienes han llamado a una huelga la tarde de este jueves 16 de febrero.
En tanto, la Secretaría del Trabajo y Previsión social (STPS) señaló que mantiene coordinación con la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores y la Asociación Sindical de Sobrecargos.
Además, señaló que mantiene diálogo con empresas del sector como Aeroméxico, Viva Aerobus y Volaris, “para aprovechar la experiencia y talento de los trabajadores que deseen continuar laborando para incorporarlos a sus plantillas”.
Asimismo, señaló que la solicitud de los trabajadores se procedió el embargo precautorio de los bienes de la empresa Aeromar, “para garantizar el pago de sus adeudos de manera preferente”.
Según Aeromar, la aerolínea realizó todos los esfuerzos por preservar la fuente de empleo para los casi 700 trabajadores y sus familias.
Por su parte, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) informó que implementa un plan de apoyo para todos los usuarios que habían adquirido un vuelo en las próximas fechas con Aeromar.
IMPACTO EN EL MERCADO
Carlos Torres, analista de aviación señaló que el mercado se reorganizará como lo ha hecho en otras ocasiones como durante la salida de Mexicana de Aviación e Interjet.
Sin embargo, criticó que la regulación de las autoridades aeronáuticas mexicanas “deja mucho que desear”, pues contrastó que “no han podido alertar de esta situación (de endeudamiento) y no solo eso, sino que también permitieron que siguiera endeudándose (Aeromar) con aeropuertos y combustible».
“Ellos están facultados para hacer una revisión, no solo operativa, sino también financiera de las empresas porque tienen un título de concesión público”, concluyó Torres.