Por Fiorella Méndez – Economista
Cuando escuchamos o leemos este término, normalmente hacemos referencia a la obra de Ballet que lleva el mismo nombre; pero dicho término también está relacionado con la economía.
El cisne negro en el ámbito económico hace referencia a una teoría que describe una metáfora donde el suceso de un acontecimiento inesperado o impredecible puede generar un gran impacto en el ámbito socioeconómico.
Son todos aquellos hechos que no fueron previstos, esperados o analizados previamente, poco probables de que sucedan; y que al momento de su suceso o un tiempo después, causan un impacto positivo o negativo para los agentes socioeconómicos, con posibles grandes repercusiones.
Como es de esperar, una vez que se presenta este suceso, se realizan los análisis y estudios en búsqueda de las posibles causas que produjeron estos hechos y, al mismo tiempo, evaluar soluciones para próximas repercusiones.
Historia de la Teoría
La creación de esta teoría se da por el investigador libanés Nassim Nicholas Taleb; quien la nombró de esta forma porque anteriormente, en Europa, no había posibilidad de que existan cisnes con plumas de color negro, solo los blancos eran conocidos en aquella época.
Pero en el siglo XVII, llegó a Australia esta nueva especie de cisne de color negro que nunca fue visto en este continente, lo cual causó gran impresión y polémica, ya que era algo improbable de suceder.
En consecuencia de este hecho, Taleb desarrolló esta teoría, donde explica que hay acontecimientos completamente inesperados (por la poca o nula probabilidad de que ocurra) que genera un impacto económico y social trascendental.
En ocasiones se podrían apreciar señales que pasaron inadvertidas y que pudieron predecir el fenómeno o acontecimiento. Buscaba con esta teoría demostrar el conocimiento limitado que posee el ser humano: incluso con los grandes avances de la ciencia, no se pueden predecir estos acontecimientos.
De igual forma, Taleb indica que algunos análisis económicos de eventos ocurridos en el pasado pueden generar predicciones relacionadas con alguna aparición imprevista de un cisne negro.
Características que definen a un hecho como “Cisne Negro”
Acorde a Taleb, un suceso es considerado Cisne Negro si posee las siguientes características:
- Que cause un gran impacto.
- Poco probable de que suceda.
- Tras el suceso, este se analiza con una retrospectiva de si el hecho se podía haber previsto.
Cisne negro en la actualidad
Al igual que en la época de surgimiento de esta teoría, los hechos inesperados – catalogados como “Cisnes negros” – se siguen dando en la actualidad, sin ninguna explicación o anticipación de los hechos.
Entre los acontecimientos que se dieron a lo largo de la historia, a estos se los denomina Cisnes Negros:
- El atentado a las Torres Gemelas
- El hundimiento del Titanic
- El Brexit
- Desplome de la bolsa de valores en 1929
- Crisis financiera global del 2008
Esta teoría está muy presente en la actualidad debido a la reciente pandemia del Covid-19 que estamos viviendo, este suceso reúne algunas de las características de un cisne negro.
Hubo brotes de pandemia anteriores (como la Gripe Aviar, el ébola, el SARSS) y una experiencia similar a la de ahora – para la cual estaban mucho menos preparados –, lo que había generado análisis de posibles rebrotes o nuevos virus.
Pero a pesar de estas señales o alertas para prevenir o disminuir el impacto de posibles sucesos similares, nadie se preparó para lo que ahora está aconteciendo y esto es por una cuestión de probabilidad.
Ya existieron acontecimientos y estudios a partir de estos sucesos, que alertaban la posibilidad de una nueva pandemia; pero para los que realizaron los estudios, estas probabilidades eran muy bajas y no le dieron la debida importancia, suponiendo que no iba a suceder o que íbamos a estar preparados en caso de que se dé.
La realidad es que ningún país estaba preparado para afrontar esta pandemia, por lo cual debemos sacar la lección de este acontecimiento para enfrentar próximas crisis, de tal forma a que se puedan disminuir los riesgos y efectos negativos.
La pandemia del Covid-19 no puede ser definida como un Cisne Negro, ya que anteriormente hubo sucesos que alertaron de esto y se esperaba que eventualmente ocurra. Lo que pasó ahora fue algo ciertamente esperado en un tiempo indefinido, pero para lo cual nadie estaba preparado para sobrellevar la situación.
Con esto es más claro lo que explica la teoría del cisne negro: en la vida podemos tener todo planeado y definido, pero siempre existen cosas o factores externos que suceden sin esperar y pueden sorprendernos; al mismo tiempo, podemos no ser capaces de controlar esa situación debido a que no estábamos expectantes del suceso.
Esta teoría tuvo un mayor alcance y reconocimiento cuando Nicholas Taleb publicó su libro en el 2007 “El cisne negro – El impacto de lo altamente improbable”, en el cual desarrolla el concepto de su teoría. Para él, la economía y la historia avanzan mediante estos sucesos que producen un cambio drástico.
Impacto en la economía
Según Taleb, los bancos y empresas de finanzas y/o comercio son más vulnerables a estos sucesos y pueden ser afectados con un mayor impacto, que puede superar lo pronosticado por modelos estadísticos o matemáticos.
Los efectos pueden causar grandes pérdidas, desestabilización del mercado, histeria e inseguridad financiera tanto para los inversores como para el mercado mismo, que en muchos casos no presentan una pronta recuperación.
Como los sucesos del Cisne Negro tienen una probabilidad casi nula de que ocurra, quedan fuera de las proyecciones o los análisis de riesgos que realizan las empresas, lo cual resulta grave para el momento que se presenta.
De igual forma, actualmente existen profesionales del ámbito que ya incluyen en sus análisis y proyecciones posibles cisnes negros, con el fin de no descartar la posibilidad de un suceso similar y así tener una planificación en el momento.
Evitar que se produzca un Cisne Negro
Un suceso que es llamado Cisne Negro, así como lo dice su definición, no se puede predecir o anticipar; de ser así, no se llamaría de esta forma. Por este motivo, no existe la posibilidad de que una persona pueda anticiparse a los hechos de un Cisne Negro, dada su naturaleza.
En base a los acontecimientos previos, lo que se puede hacer es prepararse mentalmente para sucesos inesperados, y así no actuar con pánico y desesperación cuando ocurran estos sucesos: tratar de manejarlo de la mejor forma posible y buscar las mejores alternativas para beneficios a futuro, con conclusiones que nos ayuden a formar más la mente de uno ante estos hechos.
Taleb también propone utilizar estrategias en las que, cuando existan fallas o se presenten estos sucesos, el impacto negativo sea limitado y el beneficio, ilimitado.