El Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) mide la pobreza más allá de los ingresos, abarcando carencias en áreas como trabajo y seguridad social, vivienda, salud y educación. Este enfoque proporciona una visión más completa de la pobreza, ayudando a diseñar políticas públicas más efectivas. El IPM no solo indica la proporción de personas que son pobres en múltiples dimensiones, sino también la intensidad de sus privaciones, ofreciendo una herramienta poderosa para la planificación social.