La alta inflación registrada en el país, que según el último informe del Banco Central del Paraguay (BCP) ha alcanzado, de manera interanual, una tasa del 9,3%, empuja y obliga al Consejo Nacional de Salarios Mínimos (Conasam) a analizar una suba del salario mínimo.
Según adelantaron, en la quincena de este mes el Conasam ya podría remitir al Ejecutivo su recomendación de aumento y teniendo en cuenta la variación interanual del Índice de Precios al Consumidor (IPC), el salario mínimo podría llegar a unos G. 2.500.000.
Cabe recordar que este incremento se suele dar en el mes de junio, establecido por Ley pero la normativa también estipula que se puede adelantar “en los casos de profunda alteración de las condiciones macroeconómicas y financieras o de elevadas tasas de inflación”.
En nuestro país, de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), existen 1.401.965 asalariados, de los cuales, se estima el 35% perciben un salario mínimo, es decir, son los que se verán beneficiados con la suba.
De esta manera, como cada año, a excepción de 2020, se tendrá un reajuste pero probablemente en este 2022 será de manera adelantada por los factores señalados más arriba.
No obstante, este reajuste, según mencionaron referentes del sector empresarial y gremios de trabajadores, incidirá en nuevos aumentos de los precios, lo que se conoce como inflación de segunda vuelta. Esto sucedió en años anteriores por lo que cada sector tiene su opinión sobre el porcentaje de aumento que se debe dar.
Los mismos indicaron que el aumento del salario obliga a las empresas y comercios a realizar ajustes en sus productos que se traduce en incrementos de precios para los consumidores finales y por tanto este factor incidirá en la inflación.
Apurar decisión
Julio López, titular de la Confederación de la Clase Trabajadora (CCT), comentó que la situación actual apremia y es urgente que se defina un reajuste salarial para los trabajadores paraguayos.
Indicó que el porcentaje de reajuste estaría en torno al 10% pero que desde gremios insisten en que debería ser más del 30%, “evidentemente eso no está en la voluntad del Gobierno por eso creo que vamos a seguir luchando, vamos a seguir insistiendo, probablemente se tomen otras medidas al respecto”, indicó.
López mencionó que la tendencia es que en esta quincena de abril ya se defina el aumento ya que todos reconocen los incrementos que se están dando en los precios de los productos de la canasta básica e incluso “por una situación de conveniencia política el Gobierno va a tener que otorgar”.
“Un nuevo ajuste salarial va a producir nuevamente una estampida en los precios y eso afecta a todos los sectores, no solamente a los que ganan el salario mínimo y un poco más”
Julio López, titular de la Confederación de la Clase Trabajadora (CCT).
No obstante, adelantó que el porcentaje que destinarán probablemente será insuficiente. Además, recordó que existen otros factores que se tiene que tener en cuenta como los miles de trabajadores que no llegan a percibir siquiera el salario mínimo y que también sufrirán los efectos que va a producir el reajuste.
“Un nuevo ajuste salarial va a producir nuevamente una estampida en los precios y eso afecta a todos los sectores, no solamente a los que ganan el salario mínimo y un poco más”, dijo.
El gremialista precisó que existen miles de trabajadores que perciben por debajo del salario mínimo que también van a recibir “el peso de lo que representa la inflación, producto del reajuste salarial”.
“Una vez que se produce el reajuste salarial ya se alzan todos los precios, eso afecta a toda la población, en nuestro país solamente el 30% de todos los trabajadores que son aproximadamente 500.000 personas gana entre el salario mínimo y un poco más del salario mínimo”, detalló.
Por último, indicó que por todas estas situaciones insisten en que el Gobierno, además de decretar el reajuste salarial necesario, también apunte a determinar medidas que orienten a la conservación del valor de los salarios como por ejemplo el control de los precios, fundamentalmente aquellos que conforman la canasta familiar.
Análisis riguroso
Jaime Egüez, presidente del Club de Ejecutivos del Paraguay sostuvo que por Ley está establecido que se deben dar los reajustes pero enfatizó en que se debe dar un análisis riguroso sobre el porcentaje de aumento.
“Eso tiene que ser analizado rigurosamente porque va a terminar impactando otra vez solamente a las empresas formales, las que pagan salario mínimo, las que están registradas en el Instituto de Previsión Social (IPS).
Egüez dijo que desde el citado Club piden que el porcentaje de incremento decidido sea resultado de estudio netamente técnico, que no entre ningún tipo de escenario que no sea lo técnico.
“Tenemos que tener cuidado de no cometer en cierto modo algún tipo de desliz y ser irresponsable en el cálculo porcentual, el porcentaje debe darse siempre en el área técnica, no tiene que ser algo político o subjetivo, no sé trata de un tema de percepción se trata de un tema técnico”.
Jaime Egüez, presidente del Club de Ejecutivos del Paraguay
“El salario mínimo es un factor muy crítico en la economía paraguaya sobre todo para el sector formal qué es el sector que sostiene al país. Necesitamos que haya una rigurosidad máxima acá y sobre todo que está discusión que va a estar en el sector privado, también sabemos que en algún momento se va a dar en el sector público”, señaló.
El presidente del Club de Ejecutivos reiteró en que se debe tener prudencia, que se analice en un espacio altamente técnico.
Además, indicó que en el transcurrir del este año se tendrá modificaciones en la tasa de inflación que irá bajando al nivel proyectado por la banca matriz.
“Tenemos que tener cuidado de no cometer en cierto modo algún tipo de desliz y ser irresponsable en el cálculo porcentual, el porcentaje debe darse siempre en el área técnica, no tiene que ser algo político o subjetivo, no sé trata de un tema de percepción se trata de un tema técnico”, reiteró.