En la actualidad, Paraguay atraviesa un momento importante en materia económica. Luego de poco más de un año de haber alcanzado la calificación de grado de inversión por parte de una de las calificadoras de riesgo, y mostrar un crecimiento que sigue manteniéndose constante, nuestro país se enfrenta el desafío de sostener su calificación y al mismo tiempo, diversificar sus motores de desarrollo.
En ese sentido, MarketData conversó en entrevista exclusiva con Andrés Pérez, economista jefe de Itaú Unibanco, quien compartió su visión sobre las proyecciones económicas para lo que resta del año. Pérez además habló sobre los beneficios de contar con grado de inversión y las oportunidades que se abren en el mediano plazo.
PROYECCIONES
Itaú prevé que la economía paraguaya mantenga un buen desempeño para lo que resta del 2025. “En términos de actividad económica, nuestra proyección para este año es una expansión del PIB del 4,3%, muy similar a la tasa de crecimiento registrada el año pasado, que fue de 4,2%”, mencionó el experto.
Por otro lado, para el próximo año, esperan una moderación en el ritmo de crecimiento, con una tasa estimada de 3,5%. Respecto a la inflación, el economista subrayó que se mantendrá bajo control, “proyectamos un cierre en torno al 4%, en línea con la meta establecida por el Banco Central del Paraguay”.
En el frente cambiario, advirtió sobre un ajuste gradual, por lo que estiman una depreciación de la moneda extranjera desde los niveles actuales, ubicándose en torno a G. 7.750 por dólar para finales de este año.
Pérez recordó que los determinantes inmediatos en el tipo de cambio responden a los flujos de capital, “es importante recordar que sus determinantes de corto plazo suelen estar vinculados a los flujos de capital. En ese marco, nuestra proyección es que el tipo de cambio registre una depreciación desde los niveles actuales, ubicándose en torno a G. 7.750”.
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CONFIANZA PESIMISTA
En otro momento y consultado sobre su opinión respecto a que, a pesar que las proyecciones de crecimiento se corrigen al alza, esto no se refleja en la percepción de los consumidores, cuya confianza sigue siendo pesimista, Pérez explicó que se trata de un fenómeno más amplio.
Vale recordar que el Índice de Confianza del Consumidor (ICC) del BCP, registró un nivel de 47,80 en julio de 2025, por encima de lo observado en junio, pero por debajo del nivel de julio de 2024 (54,82). En cuanto a la predisposición a ahorrar de los hogares, solo un 18,25% de las personas respondió tener la posibilidad de ahorrar. Este resultado fue menor al del mes de junio en 1,00 pp y en 2,00 pp al registrado en julio de 2024.
“La revisión al alza en las proyecciones de crecimiento no es un fenómeno exclusivo de Paraguay. De hecho, hemos visto un comportamiento similar en Brasil, impulsado principalmente por las sorpresas positivas en el sector agropecuario”.
Sobre la confianza del consumidor, agregó que el hecho de que se mantenga en niveles por debajo de lo neutral, “también es un fenómeno presente en varios países de la región”. A su criterio, esto responde en gran medida, “a la herencia del fuerte choque inflacionario que experimentó el mundo tras la pandemia”.
Asimismo, recordó que los precios continúan en niveles bastante más altos de lo acostumbrado, “y eso pesa en la percepción de los hogares, aun cuando los indicadores macroeconómicos muestran un desempeño favorable”, agregó.
PARAGUAY GRADO DE INVERSIÓN
Durante la entrevista, el economista jefe de Itaú Unibanco también recordó que hace no mucho, Paraguay cumplió un año con grado de inversión y al ser consultado sobre los beneficios de esta nueva categoría y el tiempo en que se verían reflejados, aclaró que es “un proceso gradual”.
Cabe recordar que cuando una economía alcanza la calificación de investment grade, suele ser asociada con mejores condiciones de financiamiento para el soberano, lo que a su vez, se traduce en menores tasas o spreads más bajos también para las empresas y los hogares.
Andrés Pérez destacó además que los beneficios ya están en marcha y que los resultados ya deberían comenzar a observarse, aunque no se trata de un cambio inmediato o discreto en una variable específica.
“Más bien son efectos que se consolidan con el tiempo y que se reflejan, por ejemplo, en la expansión del crédito y en el acceso a financiamiento en condiciones más favorables”, aseguró.
De cara al futuro, enfatizó que lo fundamental para mantener o incluso mejorar la calificación de riesgo actual, es sostener el crecimiento. “Es una tarea continua y permanente, en la que el crecimiento económico debe estar siempre en el centro”.
A la opinión del experto, mirando los desafíos de políticas públicas y económicas, el crecimiento sigue siendo el eje principal, por lo que las proyecciones de los analistas “se quedaron cortas” en varias ocasiones, y el desempeño económico sorprendió al alza.
“Esto refuerza la idea de que sostener un crecimiento sólido es clave para preservar la posición de grado de inversión en el tiempo”, afirmó Pérez.
DIVERSIFICACIÓN ECONÓMICA
Por otro lado y sobre la necesidad de diversificar la economía paraguaya, el economista fue enfático al asegurar que “no existe una receta mágica para avanzar en el desarrollo económico” haciendo referencia a que es “natural” que las economías sigan apoyándose en aquellos sectores donde tienen una clara ventaja comparativa, como el caso de Paraguay con el agro y la energía.
Al mismo tiempo, remarcó la importancia del mercado interno y destacó que a medida que la economía se va desarrollando de la mano del impulso que genera el sector externo, el mercado local también cobrará cada vez más relevancia.
“En ese sentido, el crecimiento del consumo y de los servicios de los hogares juega un papel fundamental, fortaleciendo nuevas dinámicas de expansión que complementan a los sectores tradicionales”, sostuvo.
DESEMPEÑO DE LA BANCA Y MERCADO DE VALORES
En cuanto al sector financiero local, Pérez consideró que el desempeño al igual que la dinámica actual del crédito, es positiva. “Lo habitual es que el crédito crezca a un ritmo más acelerado que la propia actividad económica, un fenómeno que observamos en otras economías y que también se está reflejando en el comportamiento reciente de Paraguay”, agregó.
Finalmente, habló sobre el mercado de valores y destacó el rumbo que están tomando las políticas y reformas planteadas, “creo que el ímpetu que se observa en la política económica, orientada a fomentar el crecimiento, la inversión y el ahorro interno, es bien valorado desde la perspectiva de los mercados y de los analistas”.
Sin embargo, advirtió que el desafío todavía pasa por la implementación. “En cuanto a los detalles, es fundamental que esos aspectos se vayan definiendo y cerrando en el ámbito legislativo y ejecutivo, que son los espacios donde finalmente se discuten y se materializan las reglas que darán mayor solidez al desarrollo del mercado de capitales en Paraguay”.