El Instituto Nacional de Estadística (INE) dio a conocer los resultados de la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC) del primer trimestre del año, donde resaltan las disminuciones de trabajadores en los sectores primario y secundario.
Según el informe, entre el cuarto trimestre de 2022 y los primeros tres meses de este año, el sector de agricultura, ganadería, caza y pesca experimentó un descenso de 5.739 trabajadores, mientras que las industrias manufactureras y la construcción disminuyeron sus empleados en 76.840 trabajadores en el mismo periodo.
No obstante, el sector terciario, compuesto por servicios, comercio, restaurantes y hoteles, tuvo un aumento de participación que llegó a 67.877 personas entre el último trimestre del año pasado y el primero de este año.
Con estos números, la población ocupada registra números negativos entre el cuarto trimestre de 2022 y el primer trimestre de 2023, con 17.886 personas menos entre un periodo y otro.
Cabe destacar que se registra aun así un aumento de la población ocupada en alrededor de 80.177 personas, entre el primer trimestre del 2022 y el mismo periodo del 2023, que es resultado del aumento registrado en el sector terciario, en 157.089 ocupados entre el primer trimestre de 2022 y el primer trimestre de 2023.
Estos números contrastan con la recuperación de la actividad económica que observó el Banco Central del Paraguay (BCP) al cierre de marzo, donde ya se ve un crecimiento de 8,2% con respecto al mismo mes del año anterior.
La banca matriz registró un crecimiento acumulado de 6,1% en el primer trimestre, luego de que el 2022 cerrara con una caída de 0,5% del producto interno bruto (PIB).
Según el BCP, en el crecimiento interanual de marzo de este año incidieron, principalmente, los desempeños favorables de la agricultura, la generación de energía eléctrica, las manufacturas, los servicios y la ganadería; aunque, como se ve en los números del INE, la recuperación no permeó en los trabajadores.
El BCP también registró un resultado negativo en la construcción, que sigue atenuando la dinámica favorable de la actividad económica y está explicado por el menor ritmo en la ejecución de las obras tanto privadas como públicas.
En el caso particular de la agricultura, el BCP bien explica que se trata fundamentalmente del buen desempeño de la producción de soja, arroz, mandioca y caña de azúcar respecto a la zafra anterior.
Igualmente, en comparación con el primer trimestre del año pasado, el aumento del número de ocupados se dio en los asalariados, en alrededor de 145.498 personas ocupadas; principalmente por el aumento del sector privado, en aproximadamente 83.003 personas.
Por otro lado, con relación al último trimestre del año 2022, el descenso en alrededor de 17.886 ocupados fue debido a la disminución de los trabajadores independientes, grupo poblacional que registró diferencia negativa de 106.889 personas.
Por su parte, los asalariados registraron un aumento de 90.595 personas, aproximadamente.
La fuerza de trabajo tuvo una caída
Según el EPHC, también la tasa de la fuerza de trabajo en el primer trimestre de este año registró una disminución, llegando al 70,1% (3.750.477 personas), que comparado con el mismo periodo del año 2022 (71,2%), tuvo una diferencia negativa de 1,1 puntos porcentuales.
Desglosando estos números por área de residencia, encontramos que las disminuciones se registraron principalmente en áreas urbanas, producto de la disminución de la tasa de la fuerza de trabajo femenina que cayó 2,6%. Con relación al último trimestre del año 2022, prácticamente se mantuvo igual, ya que la tasa de la fuerza de trabajo pasó de 70,2% a 70,1%, una diferencia de 0,1 puntos.
También se vio una caída en la población ocupada, donde en comparación con el cuatro trimestre de 2022, la tasa de ocupados dio una leve diferencia negativa de 0,6 puntos, pasando de 66,2% a 65,6%.
Por área de residencia, se observó un comportamiento diferenciado, puesto que en áreas urbanas disminuyó en 1,1 puntos, pasando de 66,5% a 65,4%; y en áreas rurales tuvo un leve aumento en 0,2 puntos, llegando a 65,8% en 2023 en comparación con el 2022, cuando llegó a 65,6%.
Más hombres ocupados que mujeres
La cantidad de ocupados en el primer trimestre del año 2023 fue de alrededor de 3.507.495 personas, de las cuales el 59,5% son hombres (2.088.228) y el 40,5% son mujeres (1.419.267).
Desglosando estos números por área de residencia, encontramos que en el área urbana la diferencia se acorta ya que la población ocupada está compuesta en un 57,02% por hombres, con 1.306.825 ocupados; y en un 42,98% por mujeres, con 985.063 ocupadas.
Sin embargo, en el área rural la diferencia se vuelve a acrecentar, representando los hombres el 64,28% de la población ocupada, con 781.403 ocupados, contra 434.204 mujeres que representan el 62,28%.
Población Subocupada por insuficiencia de tiempo de trabajo
La población subocupada (que en una semana trabajaron menos de 30 horas) registró variaciones negativas al comparar el primer trimestre del año 2023 con el primer trimestre del año 2022.
A nivel nacional, se observó una diferencia negativa de 1,4%, pasando de 5,2% a 3,8% entre un año y otro.
En términos absolutos, la subocupación por insuficiencia de tiempo de trabajo afectó en los primeros meses de este año a 141.031 ocupados aproximadamente, de los cuales el 63,7% son mujeres y el 36,3% son hombres. En relación al último trimestre del año 2022, la variación nacional tuvo una leve diferencia negativa de 0,3 puntos, pasando de 4,1% a 3,8%. Cabe destacar que el mismo comportamiento se observa para ambos sexos.
La desocupación afecta más a las mujeres y al área urbana
Durante el primer trimestre del 2023, las personas clasificadas como desocupadas (no trabajan ni una hora en los últimos 7 días) fueron alrededor de 242.982 personas, de las cuales, cerca de 105.061 fueron hombres (43,2%) y 137.921, mujeres (56,8%).
En relación con el mismo periodo del año 2022, se observó que la tasa de desocupación registró una disminución de 2 puntos porcentuales, pasando de 8,5% a 6,5%. En términos absolutos, la disminución fue de alrededor de 74.048 personas. Por área de residencia, se observó el mismo comportamiento que a nivel nacional.
Entre el cuarto trimestre de 2022 y el primer trimestre de este año, se registró un leve aumento, de 0,8 puntos, pasando de 5,7% a 6,5%. Por área de residencia, se constató que la tasa de desocupación aumentó en áreas urbanas en 1,2 puntos como resultado del aumento de la tasa de desocupación femenina; mientras que en áreas rurales, la tasa no registró diferencia significativa, llegando a 4,8% en 2023 en comparación con 4,9% de 2022.
Según el INE, la desocupación afectó en mayor medida a residentes del área urbana, donde se registraron alrededor de 181.021 personas desocupadas, es decir, de cada 10 desocupados, 7 corresponden al área urbana.
Población ocupada formal e informal
Con relación a la formalidad, según el informe del INE, si comparamos el primer trimestre del año pasado con los primeros tres meses de este año, la población ocupada en actividades no agropecuarias aumentó en alrededor de 107.058 personas, de las cuales 113.841 son ocupados formales (asalariados que cotizan a algún sistema de jubilación en su ocupación principal o independientes que cuentan con RUC por la actividad económica declarada como principal).
Mientras, en comparación con el último trimestre del año pasado, este primer trimestre de 2023 registró una variación negativa en alrededor de 12.147 ocupados no agropecuarios menos. De este número, los ocupados informales no agropecuarios totalizaron una disminución de 76.605 personas.