San José, 10 mar (EFE).- El Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) destacó este miércoles que la agricultura regenerativa es posible bajo la producción de alimentos adecuados y nutritivos y tomando en cuenta la restauración de ecosistemas deteriorados por la actividad humana.
Las autoridades informaron que se trata de una forma de producir que, a través de buenas prácticas, puede cumplir su misión de alimentar a la creciente población mundial al tiempo que no deteriora los suelos y, por el contrario, contribuye a su salud y a su recuperación.
Expertos de América Latina y el Caribe discutieron sobre el tema durante un evento organizado por la productora de alimentos y bebidas Pepsico y el IICA, con sede en Costa Rica.
El científico Rattan Lal advirtió que la humanidad no tiene otro camino que «transformar su agricultura en este sentido», y durante la conferencia conversó sobre el potencial y los desafíos de la agricultura regenerativa.
Los principios fundamentales de la agricultura regenerativa, según explicó Lal, son los relacionados con «la conservación de los recursos e incluyen la siembra directa, la reutilización de los residuos de las cosechas como abono natural, el empleo de cultivos de coberturas, el manejo integrado de nutrientes y de plagas, la rotación de cultivos y la integración de la agricultura con los bosques y la ganadería».
«Hoy se escuchan cuestionamientos a la agricultura. Pero no podemos dejarla de lado porque es esencial para la nutrición de la humanidad y la necesitamos. La agricultura tiene que ser una solución; de ninguna manera puede ser un problema», dijo Lal.
El especialista además hizo un llamado a hacer una nueva «Revolución Verde, basada en la salud del suelo, que es una entidad biológicamente activa, de la que depende no solo la seguridad alimentaria y nutricional de la humanidad, sino también la calidad del aire, la purificación del agua, el secuestro de carbono y la conservación de la biodiversidad».
Según las autoridades, la transformación que propone debe ir hacia una agricultura inspirada por la innovación ecológica, movida por fuentes de energía carbono-neutrales, respaldada por una economía circular y una infraestructura verde, y apoyada en la recarbonización de la biósfera terrestre.
«La agricultura regenerativa hace mucha falta a nuestros campos. En los distintos países de América Latina hemos podido comprobar la degradación de los suelos. Tenemos que asumir un fuerte compromiso de regresarles la vida», afirmó el director de Agricultura para América Latina de Pepsico, Arturo Durán.